Cuestión de orgullo [Cuestiones I]­ ©

42. Carrie y Storm

Torrance

La fecha que menos quería llegó, el año culmina, las fiestas por el fin de curso se dispararon por doquier y para mi sorpresa muchos profesores exaltaron mi mejoría en las notas, que aunque no eran las mejores, si fueron suficiente para que pasara el año y todo casi en tiempo récord. Aunque bueno, tengo que quedarme unas semanas extras para entregar unos deberes pendientes que terminan por complementar algunos trabajos que no tuvieron buena calificación y al fin recibir el merecido título de graduación.

Por todo lo demás, a pesar de ese contratiempo, me permitieron graduarme junto con los demás.

Así que aquí me encuentro, en medio de mis compañeros de curso, esperando a que terminen la palabrería los profesores y el chico que designaron para dar el discurso alentador sobre lo maravilloso que fue el año lectivo, para que al fin entreguen los diplomas. Obvio a mí me entregarían solo un rollo de pergamino que simula el título, no me la dejarían tan fácil.

Miro alrededor, estoy en las primeras filas pues es en orden de lista que llaman, siendo la segunda en pasar, por lo que desde mi lugar tengo una amplia perspectiva del sitio donde están acomodados los padres. Hallo a Hope, quien para mi sorpresa habla muy a gusto con Ronnie, decidieron venir a acompañarme; cuando los veo me saludan con un ademán de la mano. Alzo la vista, buscando a quien me prometió que estaría presente para verme recibir el título, pero no lo encuentro por ningún lado. Siento una cierta desilusión pues estaba a punto de acabar los discursos, solo que cuando estoy a nada de dejarme embargar por la tristeza veo al fondo de pie un rostro familiar que me saca una enorme sonrisa que inevitablemente me hace revelar mis dientes.

Ethan está al fondo del recinto, de pie atrás de las sillas dispuestas para los padres, se nota que acaba de llegar de la oficina. No me ha notado, está concentrado de brazos cruzados viendo hacia el escenario. Tengo ganas de gritar de la emoción.

De repente el timbre de mi celular me sobresalta. Rebusco bajo mi toga, entre los bolsillos de mis short que llevo bajo mi vestido. Cuando lo tengo contesto sin mirar el remitente.

—¿Aló?

—Thor, lamento llamarte hasta ahora, pensaba hacerlo antes, ¿ya te graduaste? —Esa familiar voz me hincha el pecho de emoción.

—Llamas a tiempo, están por llamar para entregarme el diploma. Pensé que te olvidaste de mi Doom.

—Perdón, pero hacer llamadas internacionales me cuesta, soy torpe para eso.

—Se nota —mofo, rodando los ojos.

—¡Hey! Al menos dame crédito. Espero Ethan haya contratado el camarógrafo que le pedí para que tome videos y fotos.

—No exageres, no es para tanto, solo recibiré un título y ya, es más, no es verdadero pues me falta validar muchas cosas para que me den el cartón que sí es.

El discurso de mi compañero termina, uno de los profesores se para en el podio dando anuncio de que van a empezar a llamar a los graduados.

—Doom, tengo que colgar, ya me irán a llamar —aviso con cierto afán.

—Okay, Thor, muchas felicidades, luego te estaré llamando —expresa en sinceridad que me hace suspirar.

—Te quiero, Doom.

—Te quiero, Thor.

Al colgar empiezan a llamar, el primero es Zack que está a un puesto de distancia de mí, lo miro de soslayo. Nuestra relación nunca fue, la verdad no es que me atormente por eso, sino que me siento un poco mal por cómo resultaron las cosas. Mi intención nunca fue herirlo, pero como digo, a veces no se puede evitar que la gente se haga de ilusiones por mucho que les pongas términos, pero en fin, al menos lo tomó con madurez.