2 | Lo que no sabes ── Élite [EDITANDO]

C U A T R O

POV Ander

— TÚ ERES GILIPOLLAS Y UN PUTO EGOÍSTA. — empujo a Polo molesto. Desde que me había contado que él había matado a Marina mi vida era una completa mierda. — ¿Cómo te atreves a contarme algo así? 

Luego de dejar a Gabriela en su casa, fui a la mía y al llegar a mi cuarto me encontré con Polo con los ojos llorosos esperándome. Le pregunte que le pasaba que me contara que podía confiar en mí. 

Gran error.

Me dijo lo que lo atormentaba, que él era el verdadero asesino de Marina. Quise huir. Fue mi primera reacción pero Polo me rogó que no lo dejara, que fue un arrebato de rabia que no sabia lo que hacía. Le dije que no le iba a contar a nadie, pero que se tenía que ir. Se fue de mi casa, pero esa noche no pude dormir. No pude dormir ni mierda y me quede pensando en Guzmán, en Gabriela que si se enteraban no sabía lo que iba a pasar.

— ¡Eh! — Polo me mira asustado sin saber que decir.

— ¿Qué pretendes? ¿Qué trague con toda esta mierda ahora o que? — estaba tan enojado. — Polo no puedo.

—No, no, no me asustes Ander.

— No puedo seguir como si nada que no puedo mirar a Guzmán ni a Gabriela a la cara. — grito. — Le has destrozado la vida. — lo veo nervioso y eso me enfurece más. — Gabriela piensa que me pasa algo. Ella no es idiota imbécil se dará cuenta y yo no puedo hacer como si nada, fingir que nada paso. Fingir que tu no viniste a mi casa y me contaste tremenda mierda.

— No se que esperas de mí. — Polo se mueve incomodo mientras me ruega que no diga nada.

— Se los vas a contar. ¿Me oyes? 

— No. — Polo respira agitadamente mientras muestra negativas a contarle a Guzmán lo que le hizo a su hermana.

— Si, Polo. Tienes 24 horas. O se lo dices tú o se lo digo yo. — camino rápido alejándome de Polo. 

— ¡Ander!

⨳⨳⨳

— ¡EY! — Gabriela me llama, y yo hago como si no la hubiese escuchado. No podía con la culpa. — Ander ¿Me vas a ignorar? ¿Qué coño te sucede?

— No te escuche. — me acerco a ella. — Lo siento. Últimamente estoy volado

— Vale pero de eso ya me di cuenta. — me mira tratando de descifrarme. — ¿Estas bien? Desde que has llegado a las Encinas estas raro. ¿Sabes que puedes contarme lo que sea no? 

— Tu sabes desde que Omar se queda en mi casa por lo de la pelea con su padre. Me siento incomodo. — Le doy una excusa para que deje de sospechar de mi actitud. — No puedo con la culpa sabes como soy.