Capítulo 11

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Era la hora la de la cena, Richard yacía preparando esta en la cocina ya que la gastronomía era su especialidad y como su amado rizado le había pedido cocinar que mejor que consentirlo, Christoph por su parte estaba muy apegado al guitarrista a tal punto que lo tenía abrazado por la espalda mientras que este cocinaba.
__Ey mi amor... Si sigues así te puedo quemar. Decía el guitarrista preocupado de no quemar las manos de su amado que estas estaban posada en el abdomen del alemán menor.

__Ah... Mi Reesh, no me hagas esto, quiero seguir contigo. Musitaba el rizado en lo que posaba su cabeza en el hombro ajeno.

__Chris... Me estás... provocando... Decía el guitarrista en tono bajo.

__A mí también mi amor ¿estás sintiendo?. Decía el baterista en lo que pegaba su entrepierna en el trasero ajeno

__Hummm... ¿Eso tan grande lo he provocado yo?... Musitaba coqueto.

__Así es mi Reeshie... Lo estás provocando mi amor...

El ambiente estaba muy meloso cuando de la nada llega la hija de Richard.

__¡Ups! ¡Perdón! No vi nada. Decía esta cubriéndose los ojos.

En ese momento el rizado se separó del guitarrista y se fue a sentar a una mesa que había en la cocina. Mientras que el guitarrista seguía cocinando estaba bastante avergonzado para darle la cara a su hija.

__Suerte que Richard no me dejó desnudarlo sino, ya lo tendría cocinando con solo la pechera de la cocina. Decía Christoph solo para molestar a su amado.

__Ay Doom. Se reía por parte la muchacha.

Richard no aguantaba más de la vergüenza que estaba pasando, estaba a pasos de meter su cabeza a las ollas para esconderse, en ese momento la muchacha se levanta de la mesa para ir donde su padre y darle una suave palmada en el hombro.

__Calma papá, los dejaré a solas, cuando esté listo me avisas. A continuación le daba un suave beso en su mejilla.

En ese momento la muchacha se retiraba de la cocina dejando completamente a solas a Christoph con Richard, en silencio el guitarrista fue a apagar la cocina para lanzarse directo a los brazos ajenos, aprovechando que este estaba sentado Richard quedaba sentado en su regazo.

__Humm... Maldito... Me avergonzaste. Decía en lo que rodeaba sus brazos en el cuello ajeno.

__Esa era la idea mi nalgón. El rizado por su parte llevaba sus manos directo a masajear el trasero ajeno.__ Era que te pusieras rojo hasta las orejas mi vida.

__Esta vez tú serás mío. Sin pensarlo el guitarrista lo besaba con pasión bajando sus manos a levantar la camiseta ajena cosa de inmediato introdujo sus manos a acariciar el abdomen de este, parecía bastante impaciente a tal punto que clavaba sus uñas con suavidad en la piel ajena.

Todo iba muy bien entre Richard y Christoph cuando un vago recuerdo invadió al guitarrista, era una escena que así mismo estaba con Till, fue en ese momento que Richard detuvo sus acciones de golpes y se fue a sentar al otro lado de la mesa, su mirada se veía triste, nostálgica, una mezcla muy extraña sentía en este mismo momento. Fue en ese entonces que Christoph se acercó a abrazar a su amado con fuerzas.

__¿Qué pasa mi amor?... Preguntaba el rizado en lo que acariciaba su rostro.

__Hay algo que no te he contado Chris... Musitaba el guitarrista preocupado.

__¿Qué tienes?... Esta vez el rizado se preocupaba.

__No... Olvídalo...

__Te conozco Richard, llevamos tanto tiempo junto que sé que hay algo que está ahogándote.

__Chris... Tú ausencia provocó en mi estados de ansiedad muy fuertes, a tal punto que me desmayaba... ahora... en lo que estábamos me vino un vago recuerdo de Till... En ese momento el guitarrista soltaba un pesado suspiro.__ Qué pese a que me dañó, él aguantó muchas cosas en mí cuando estaba así, no sé por qué me siento tan extraño.

__Reeshie... ¡No te sientas apenado! No me molestaré en absoluto con esto. Lo animaba con una gran sonrisa en su rostro. __ Agradezco un montón que seas sincero conmigo, tú sabes, que conozco todo de ti y sé cuán sensible de sentimientos eres, nunca temas a decirme absolutamente nada. Y sobre Till, a ese patán solo le agradezco que haya cuidado de ti.

__Chris... Estoy feliz de poder confiar en ti. En ese momento el guitarrista abrazaba a su amado con fuerzas, su seguridad volvía de a poco.

__Yo te amo Richard ¿ tú me amas?. Preguntaba en lo que correspondía a su abrazo.

__Te amo... Ni te imaginas lo que te amo...En ese momento nuevamente invadían los recuerdos que tenía con Till, cuando escuchó por primera él te amo de él y el primer te amo que el guitarrista le dedicaba al alemán robusto, en ese momento volvía a hablar.__ Pero... ¿Es normal que también ame a Till?...

Christoph al escuchar aquello se sentó al lado de su amado para hablar de mejor forma.__ Richard ¿Tú amas a Till?. Preguntaba serio.

__No lo sé Chris, no sé qué siento por él... Es una mezcla de odio y a la vez amor, como una dulce condena. En lo que terminaba su palabra bajaba su mirada.

Christoph de inmediato fue acariciar el rostro de su amado. __ Es exactamente lo que siento por Ulri, un odio pero no puedo evitar dejar de amarla, la veía a mi lado y deseaba destruirla per, cuando estaba lejos de ella la añoraba ¿Me entiendes?

__Eso es lo que me pasa con Till... ¿Será que me hice dependiente de él?...

__Mi vida, sólo sientes eso porque llegó a tu vida en el momento más crítico, como a mí.... Urlike llegó a mi vida cuando Gladiola murió... ¿No crees que es coincidencia mi amor?...

__Así es Chris... Pero... ¿Crees que es necesario volver con Till para dejar de sentirme así?...

__Mi vida, aunque vuelvas con tu primera esposa siempre estaré para ti, no importa que estés con Till ni yo estar con Ulri, mi ser pertenece a ti cómo tú me perteneces.

En ese momento el guitarrista se quedaba analizando la situación, ahora estaba en sus manos seguir con Christoph o volver a las manos de Till.

Mi Dulce Condena +18. TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora