Señorita Momo - Yaoyorozu x Lectora

02

Yaoyorozu estaba felíz de tener a una persona de su edad en la casa, pensaba en que podrían hacerse grandes amigas — ¿(Ta) (Tn)? ¿Verdad? — giró un poco su cabeza para verla, (Tn) inmediatamente quitó sus ojos del trasero de su ama, con nerviosismo de esperar no ser atrapada.

— sí, señorita Momo — también asintió con la cabeza.

— ¿Cómo te gusta que te llamen? — el faz de (Tn) se mostró levemente sorprendido, en el fondo sintió alivio de que Yaomomo no se percatara de dónde estaba viendo, también sintió alivio de que Yaoyorozu fuera como el señor Momo había redactado, creyó que sólo eran cumplidos superficies de un padre adulador.

— Cómo usted desee… — al contestar, su expresión se transformó en una mezcla de simpatía con picardía. Momo no entendió por qué sentía nerviosismo y calor en sus mofletes, pero esperó que su sonrisa lo disimulara, esa reacción hizo que (Tn) hiciera una sonrisa complacida.

— ¿De verdad? — seguía mirando a la nueva de la casa, el pasillo parecía eterno con sus pasos calmados — entonces… ¿Puedo llamarte (Tn)?

— Por supuesto, señorita Momo.

— bien, (Tn)— sonrió cerrando sus ojos— puedes llamarme por mi nombre, no me molestaría

— gracias por el privilegio, señorita — Yaoyorozu bostezó involuntariamente

— lo siento — dijo la heredera, pero (Tn) negó.

— ¿Señorita Momo, está cansada?

—  el entrenamiento me dejó exhausta — su expresión era apenada

— ¿Por qué no se da un baño y luego me muestra la casa? Puedo esperar si lo desea...

— gracias por preocuparte, pero prefiero acatar la orden de papá. Espera — se mostró preocupada — ¿Acaso huelo mal?

— "hasta aquí siento su exquisito aroma" — trató de mantener el semblante neutro — nada de eso, perdone si me expresé mal — agachó su cabeza. Momo soltó un suspiro y procedió a mostrarle la localización de las habitaciones, llegando por fin a la habitación que le pertenecería a (Tn).

— y ésta —  dijo abriendo la puerta — es tu habitación — ambas entraron y (Tn) no podía ocultar su asombro

— "no me jodas, hasta creo que es más grande que mi casa"  — sacudió sus pensamientos al darse cuenta de algo — señorita Momo… — volteó a verla — ¿Me hace un favor?

— claro, dime

— no vuelva a abrir la puerta, mientras esté cerca permítame hacerlo por favor.