Síndrome de Estocolmo (g!p)

capítulo # 2

Camila pov

Habíamos decidido ir al shopping con Dinah, para comprar todo lo necesario antes de la fiesta que teníamos a la noche. Una vez que teníamos todo, nos sentamos en la camioneta mientras los guardaespaldas guardaban las bolsas con todo lo que habiamos comprado. Mire a dinah y estaba metida en ese celular nuevamente.

-¡¡hoy es el gran día mila!! No puedo creer que este a horas de encontrarme con el amor de mi vida.
Dijo abrazando el celular y besando la pantalla varias veces.

- lo tuyo ya es serio dinah ¿como puedes saber que es la mujer de tu vida si no la conoces?
En realidad admiraba la libertad con la que expresaba su orientación sexual, la verdad era bastante mujeriego, pero estaba totalmente segua que esta chica la movilizaba de sobre manera. Lo sabia por ese brillo en sus ojos cada vez que hablaba de ella.

- eso no es algo que no se si podrás entender algún día Mila, es algo más fuerte de lo que puedas comprender, como sin apelar a la lógica, sabes que ella es la mujer que puede movilizar cada una de las fibras nerviosas, no lo entenderás mila, tu no das más de hetero y el hombre que tienes al lado jamás te hará sentir algo parecido.
Me reí sarcásticamente y me quede mirándola.

- ¿quien dijo que por ser heterosexual no podría sentir algo así? A parte ya sabes que estoy con shawn formalmente hace más de un año. ¡Y nos queremos mucho!

- eso es lo que sucede, tú no lo amas Mila, es tu amigo desde muy chico. Y sientes pena por el.
Me sorprendió, pero le contesté rápidamente.

- como puedes decir que tengo pena de el cheche, eso es una mentira, yo lo quiero mucho, es más mira... le compre esta camisa para esta noche.
Saque la camisa que tenía en una de las bolsas que traíamos con nosotras.

- si, si Mila... y te pregunto entonces, ¿ porque no han tenido relaciones sexuales con Shawn?
Agache la cabeza, hablar de eso era bastante vergonzoso, no era que no quería estar con el, es que aún no me sentía lo suficientemente preparada, seria mi primera vez y realmente aún tenía un poco de dudas. El habla insistido en muchísimas ocasiones, pero siempre buscaba la manera de librarme de la situación.
- no puedes mentirme a mi Mila, seguramente estás intentando darte una escusa a ti misma, pero esa respuesta tu ya la sabes , como yo te conozco desde hace años, te voy a decir porque le compraste esa camisa, no porque lo amas, si no para no sentirte tan mal por rechazarlo esto dos días que llegamos a Miami.
Ella tenía razón, me sentía totalmente culpable, fueron pocas las veces que pudimos estar solos, pero yo intentaba no quedarme más de 10 minutos a solas en un lugar con el. Ya que estaba más intenso esta última vez.

De repente sentimos la camioneta detenerse bruscamente, la inercia hizo que tanto Dinah como yo nos fuéramos hacia delante fuertemente, ya que ninguna de las dos llevaba el cinturón de seguridad puesto.
- ¿que fue lo que...

- ¡AL SUELO CHICAS ESTO ES UNA EMBOSCADA!
Grito mi chófer Erix, miré por la ventanilla y vi a tres hombres con armas caminando hacia nosotros, dos camionetas cerrandonos el paso por el frente y otras más por atras.
- ¡ABAJO HE DICHO! el nos volvió a gritar, haciendo seña que bajemos la cabeza, mi corazón estaba a mil por horas.

- ¿QUE ESTA SUCEDIENDO ERIX?
de pronto escucho un ruido ensordecedor, era el fogonazo de un arma, lo que me hizo colocar la cabeza entre mis rodillas y solo escuchar los gritos de Dinah desesperada a mi lado, ella me abrazaba queriendo colocarme debajo de ella, se oyó otro disparo y más gritos de otras persona. La puerta se abrió de mi lado, levante la cabeza un poco para mirar que sucedía y un grupo de hombres rodeaban la camioneta, busque con la mirada a Erix, pero el ya no estaba en el asiento de conductor, estaba en shock, todo pasaba tan rápido y tan lento a la vez.