Chapter VI

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Nadie se puede comparar a ti, tan perfecto para mi y aun que han aparecido tantos impostores jurando ser tu, nadie lo es.

Pero se que tantos años valdrán tanta espera, porque te voy a encontrar, solo para recordarte que mio eres desde antes de que nacieras.

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- Tony - la dulce voz de su madre lo despertó, el castaño abrió lentamente sus ojos, miro el hermoso iris de los ojos de su amada madre, quien le sonreía con cariño - Ya debes levantarte cariño -

Tony gruño y volvió a taparse con la sabana, su cabello despeinado recaía sobre la almohada, escucho la suave risa de su madre - Tony - llamo nuevamente María.

- No quiero - gruño el castaño

-Hijo tienes que despedirte de tu padre, sabes que no regresaremos hasta dentro de una semana - la voz de María hizo suspirar a Tony, quien bajo la sabana y miro a su sonriente madre, le sonrió levemente, los extrañaría, por una semana no los vería, su padre y madre saldrían en un viaje de negocios y no regresarían hasta dentro de una semana, ya no era un niño, pero siempre acostumbrara a despedirse de sus padres, aunque aún seguía molesto con Howard.

Su madre salió de la habitación y Tony no tardo en levantarse. 10 min después baja las escaleras dispuesto a despedirlos, Jarvis lo esperaba junta sus padres en la puerta, Tony abrazo fuertemente a su madre, quien beso su frente con amor y luego miro fijamente a su padre, quien lo observaba con una dura mirada, Tony no hizo nada, se despidieron con un asentimiento de cabeza y antes de marcharse, su padre le recordó la razón de su pelea.

- Al regreso discutiremos lo de buscar a tu mate - el castaño menor gruño.

- Ya te dije que no la voy a buscar, no necesito ningún mate -

La fría mirada de su padre taladro sus ojos - No está a discusión lo de tu Mate Anthony, no te estoy preguntando, la buscaras, eres el futuro alfa de la manada y necesitas a tu alma gemela a tu lado -

- Howard por favor, no es momento de discutir - trato de calmar el ambiente María.

Tony no dijo nada, con su mirada fría y sus puños apretados dio media vuelta y se marchó a su habitación, ignorando los gritos de su padre y la voz de su madre, rogando internamente que ya se marcharan. Lo que Tony no sabía era que sería la última vez en verlos.
Una semana después, un oficial visito la mansión Stark, Tony bajaba de su habitación buscando a Jarvis, cuando escucho la terrible noticia, sus padres nunca volverían, se quedó inmóvil, sus ojos se llenaron de lágrimas y sin embargo, no derramo ni una, el oficial solo lo observaba y Jarvis no tardo en acercarse a él, preocupado, un accidente que le arrebato a sus padres, aunque Tony nunca se creyó aquello y en la tumba de sus padres juro vengarse.

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Cuando Tony se apareció por el complejo, agradecía que este se encontrara vacío o al menos que todos se encontraran dormidos en sus respectivas habitaciones, había llegado muy temprano, el sol apenas comenzaba a salir, no era raro pensar que lo hizo con toda la intención, no quería ver cara a cara a Steve, al final el no era el problema, el no era un cobarde, Tony tenía mas que claro sus sentimientos, su grande gusto que tenía por el soldado de otro tiempo, pero el soldado seguía encerrado en la mentalidad de los años de antaño, donde las relaciones entre hombres estaban mal, estaba seguro que todos esos días que no apareció por el complejo, el rubio quemo su cabeza en repetirse millones de veces que el beso que le dio era malo, era algo de que avergonzarse o al menos ese era el pretexto que el castaño se repetía, no quería pensar que era que simplemente no era correspondido, Steve era su ultima pizca de esperanza de creer en el amor, luego de años de búsqueda de su alma gemela y no obtener resultados, Tony se había hecho la idea de envejecer y morir en soledad, aunque siendo realistas, su naturaleza de lobo no lo iba a dejar envejecer hasta encontrar a su alma gemela, sin ella, era un inmortal vagando por la vida en completa soledad.

Property of StarkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora