El cuento corto es que me gustó la cita a ciegas, ahora vamos a comer y sería la segunda cita y ya no tan a ciegas.
El cuento largo es este.
El jueves después de la cita: Amanece y estoy súper feliz, apenas veo mi móvil y tengo un mensaje de Mi Juliana
J: Hola preciosa, buen día.
V: Hola Juls buen día, como estas
J: Ya estoy en la constructora, tenía una revisión de planos temprano, como estas tú? Soñaste conmigo?
V: Aun en cama, ya me levanto, y sí, si soñé contigo
J: Mm que bueno entonces tuviste sueños ricos, Val voy a entrar a una reunión y no podré responderte el mobil en un rato, pero sí.
V: Sí qué?
J: Si acepto cenar juntas hoy
V: Ahh ok no sabía que tenía comida contigo
J: En serio!!! Bueno seguro se te olvidó, es que hablamos de tantas cosas ayer, entonces no vemos en taka sushi esta noche verdad?
V: mmm.... Si claro en Taka Sushi estaré como a las 7 te esperaré.
J: Ok a las 7 estaré allá.
Con que esas tenemos, resulta que esta noche cenaré con Mi Juliana, será un día largo. Y así fue, aunque estuve bastante entretenida con los diseños de un nuevo hotel en la ciudad, cada vez que podía miraba el reloj y para ser sincera contaba las horas para encontrarme con Mi Juliana. A las 7 puntualmente llegué al restaurant, es algo pequeño pero muy acogedor, la especialidad es la comida japonesa obvio comeremos sushi.
Mesa para dos por favor, _ El mesero a cargo me sugirió una mesa en la terraza que estaba hermosamente ambientada, tenía pocas mesas de estilo minimalista, el techo estaba cubierto de sombrillas de colores y lucecitas como de navidad que marcaban el camino, ya en la mesa tomo asiento y apenas giro para buscar mi mobil, veo que me está llamando.
J: Preciosa!
V: Hola!
J: Ya llegaste? Estoy bajando del auto.
V: Si, te espero, pedí una mesa en la terraza.
J: Ok ya te veo.
No pude pasar por mi casa a cambiarme, así que vestía bastante informal, un jeans azul eléctrico con un jersey bastante holgado color gris, dejando al descubierto un hombro, mi cabello suelto y de zapatos unas bailarinas grises a juego con el jersey. Chequeo mi mobil para ver la hora y ponerlo en silencio, en lo que subo la mirada la veo entrar a la terraza, más arrolladora imposible, estaba de negro total, jeans y camisa de seda con un bolso gigante color rojo a juego con sus zapatillas, maquillaje sencillo y su cabello corto perfectamente alisado y de lado, eso sí inundando de perfume por donde pasaba, lo pude percibir a metros y aun no estaba cerquita de mí.
Mis ojos estaban en su boca, sus ojos, su boca, su boca, su boca... y se acercó a la mesa sonriente como siempre. Hola!! Le dije levantándome para saludarla, y enseguida me estampó un beso en la mejilla y un abrazo, me quedé petrificada olía demasiado rico.
J: ¿Acabas de llegar?
V: Si bueno hace unos minutos prácticamente me estaba sentando cuando me llamaste, se sentó a mi lado colocando su bolso en la silla contraria.
J: Estas hermosa! Val, este sitio me encanta venden el mejor té verde de toda la ciudad.
V: mmm ok entonces imagino que vamos a tomar té verde verdad? Jajaja.