Enséñame tú realidad. [Rusmex]

•[Capítulo 2: Corrupción]•

Enséñame tú realidad.
Capítulo 2: Corrupción.

En el verdadero amor no manda nadie, obedecen los dos.
–Alejandro Casona.

[...]

El amante del picante estaba despertando por los rayos del sol que se asomaban por las cortinas de este. Se levanto y se estiro para despertar mejor, después bostezo, abrió la puerta para bajar a la segunda planta de la casa.
Al bajar se dio cuenta que el eslavo ya no estaba en el sillón y que las sabanas estaban dobladas, estaba todo ordenado.

—¿Rusia?, ¿Dónde estas?— Exclamo al ver que el eslavo no estaba en la sala.

—Я на кухне— [Estoy en la cocina] Se escucho del otro lado de la habitación.

El emblema de águila fue hacia donde se encontraba el país de clima normalmente gélido, al llegar a la cocina observo como este sostenía una taza de café y estaba sentado en la mesa mirando hacia la ventana.

"—Quisiera levantarme todas las mañanas de está manera—" Pensó mientras observaba al eslavo y sonreía como un bobo.

—Хочешь кофе?— [¿Quieres café?] Pregunto el eslavo mientras posaba su mirada en el tricolor y le daba un trago a su café amargo.

—Sí, por favor— Respondió el amante del picante y después continuo.
—Pudiste haberme levantado si querías café— Dijo mientras tomaba asiento en aquella mesa echa de madera con un mantel de flores.

—Я собирался сделать это, но ты выглядел очень спящим, поэтому мне удалось найти кофе— [Iba a hacerlo, pero te veías muy tranquilo durmiendo, así que me las arregle para encontrar el café] Respondió mientras se levantaba para servirle una taza de café.

Los dos country's se encontraban disfrutando del café amargo, mientras apreciaba la cálida mañana, era tan reconfortante para ambos estar en compañía, aún que no hubiera tanta platica, era muy cómodo solo con la presencia.

—Почему ты так себя презираешь?— [¿Por qué te desprecias tanto?] Pregunto en seco el de climas gélidos, el latino casi se atragantaba con el café, ocasionando una mirada de asombro por parte del mexicano.

—¿Qué cosas dices mi tripalosky?, Es... eso no es verdad— Lo ultimo lo respondió un poco bajo junto con una risa nerviosa mientras apretaba sus puños abajo de la mesa.

El tricromático dejo la taza en la mesa, subió los brazos a la mesa, entrelazo sus manos acomodándose de forma que daba a entender que tenía el mando en la conversación, lo miro fijamente, soltó un suspiro pesado.

—Eso no responde a mi pregunta— Soltó con un tono molesto y esta vez lo había dicho en el idioma del latino con un asentó muy marcado, lo cuál provoco con gran notoriedad una mirada de asombro del tricolor, provocando que abriera un poco la boca en forma de asombro.

Hubo un silencio en la habitación, ninguno de los dos hablaba, solo se escuchaba la respiración de ambos y uno que otro chirrido de las aves que pasaban por fuera del gran patio del latino americano.
El silencio fue interrumpido por el eslavo.

—Ну? ты ответишь мне?— [¿Y bien?, ¿Me dirás?] Miro al de menor estatura con una ceja alzada de forma que su mirada de volvía más penetrante.