Miraculous: Las vueltas de la vida.

Capitulo 19.

Nathalie se encontraba tiranda en el suelo del callejon, ese bastardo le había quitado su chaqueta, y desde arriba la miraba con deseo, la mujer solo estaba ahí tirada viendo a su agresor con miedo, su cuerpo no se movía, parecía estar petrificado ante la situación.

Mientras todo esto sucedía Chat Noir corría por los techos de la ciudad, había terminado su patrulla con Ladybug, pero aun no quería volver a su casa, además tenía pendiente el reto de su asistente así que con más razón retraso su regreso.

─¡¡Por favor detente!!

Escucho que alguien grito, por alguna extraña razón esa voz le pareció familiar, sin dudar corrió hasta la dirección en donde sintió el grito, la escena lo volvió loco, su asistente estaba tirana en el suelo, con un hombre sobre ella besando su cuello, y apretando su busto con frenesí, ella lloraba sin consuelo y sus lentes estaban tirados a unos metros lejos suyo, quebrados por el impacto con el suelo.

El felino fue inundado por una gran rabia, estiró su bastón, y de un salto aterrizó detrás del maleante, a paso rápido se paró cerca suyo, y con su bastón golpeó fuertemente su cabeza, luego lo agarro para quitarlo de encima de Nathalie y los lanzó lejos, el hombre se quejo mientras sostenía su cabeza, el héroe se acercó a el y le empezó a pegar puñetazos, y patadas.

El contrario sangraba, su rostro estaba desfigurado, y el dolor lo inundaba hasta querer morir para dejar de sentirlo, el gato lo suelta y le da una ultima patada, el maleante tose sangre y escupe unos dientes.

─Gataclismo─ dise el gato lo mira fijamente se acerca a el y sonríe ─Jamás vas a intentar hacerle nada a una mujer

─¡¡Lo prometo!!─ lloriqueo desesperado

─Las promesas se rompen, necesito hechos─ y sin dudarlo aprieta con su mano llena de su poder mortifero la entrepierna del hombre

El maleante grita de dolor, su pantalon se deshace y su hombría se cae como si se tratara de una raíz muerta arrancada de una maseta, luego la zona se llena de sangre y el hombre continúa gritando de una forma desgarradora.

─Tranquilo, ya llame a una emergencia─ se levanta y cierra la función de llamada de su bastón ─Si le dices a alguien de esto, te haré algo peor─ amenaza y fue hasta la mujer, antes levanta su chaqueta del suelo, y la sacude para quitarle el polvo ─¿Se encuentra bien?─ pregunto extendiéndole su mano, la mujer la toma y se levanta con la ayuda del héroe

─Gracias─ dijo y por el miedo que tenía lo abrazo, como si no quisiera dejarlo ir nunca más

─Ya esta a salvo, no debe preocuparse─ la abraza también

Después de varios minutos se separaron ya que el anillo empezó a hacer ruido, la mujer lo miro con pena y tomó su chaqueta, se la colocó y abrazo su cuerpo como si se protegiera de algo.

─La llevo a su casa─ musitó el felino acercándose ─Si me lo permite─ agrego tranquilo

─Claro─ respondió sin mirarlo, estaba invadida por la pena

El héroe la tomo de la cintura y la cargo al estilo princesa, el joven se asombro bastante, su asistente no era tan pesada como creia, minutos más tarde ya estaba frente a la entrada de la mansión, con delicadeza la bajo dejándola para que pueda entrar con tranquilidad en el gran hogar.

─Gracias por salvarme─ dijo acercándose al chico, depositandole un beso en la mejilla ─No se que abría sido de mi si no estabas ahí, te debo mi vida, y mi integridad─ agrego alejándose, luego abrió el portón con reja y se alejo caminando con rapidez

Chat Noir toco con su mano la mejilla en donde la mujer lo había besado, y luego se alejo sonriendo, estaba contento de poder haberla ayudado, a partir de ahora iba a prestarle más atención, no sólo debía cuidarla dentro de la mansión, sino que afuera también.

─¿Nathalie que le paso?─ pregunto el diseñador yendo hasta su asistente, a pesar de que el gato llego a tiempo, la mujer tenía varias marcas de su ataque, entre ellas el polvo en su saco, y los lentes que habían desaparecido de su rostro como así la lastimadura en su mejilla producto de la cachetada que ese rufián le había dado

─Na~Nada─ contesto viendo al suelo

─Dime por favor─ le toma del menton elevando su cara ─Mírate, estas lastimada─ observa el raspón que tenía

─Venía por el distrito catorce, y un hombre─ su voz se hace fina y se entre corta, al mismo tiempo que sus ojo se humedecen ─Me quiso hacer daño─ unas lágrimas descienden por sus mejillas

Gabriel la jala hacia el y la abraza fuertemente, la mujer esconde su rostro en su pecho y empieza a llorar sin consuelo.

─Sentí tanto miedo─ comento ─No se que habría sido de mi si Chat Noir no hubiera aparecido─ acotó calmandose

─Alegrandome de que mi enemigo estén en el lugar correcto. . .que ironico─ la separa de el ─Jamás debi sugerirle que este afuera hasta tan tarde, que error más grande cometi─ le seca las lágrimas con sus pulgares ─Desde ahora sus días libres serán acompañados del guardaespaldas o de Adrien─ menciono aliviado

─Gracias señor─ musitó con más calma que antes

─No me agradezcas, eres una parte muy importante de esta casa, jamás me lo perdonaría si te pasa algo─ la agarra de la mano ─Lo siento si te descuide mucho, creí que querías tiempo solo para ti─ la conduce hasta las escaleras y con ella camina hasta su habitación ─Prométeme que tendrá más cuidado por favor

─Se lo prometo─ sonríe

Después de eso la mujer entro en su habitación, se encerró en el baño y abrió la ducha, se sentía sucia, y aún podía sentir las manos de su agresor al rededor de sus senos.