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CAPÍTULO 11

Luna

Al final, ayer no fui a casa de Talía, y menos mal, porque si ayer me fui a la cama a las 23:00, y aun así sigo medio dormida, llego a ir a su casa y otro día más sin ir a clase...

Nada más darme cuenta de que si no me levanto, voy a llegar tarde a clase, me acuerdo de que sigo sin saber nada del amigo de Hero, Samu. Hoy sin falta voy a ir a casa de Lía, y le voy a exigir que me de alguna información del chico, no puedo seguir así.

No me hace ni pizca de gracia ir a clase, la relación entre mis compañeros y yo es casi nula. Suelo hablar con Zaira, pero está que no caga con su novio, y me aburre demasiado. Aunque ahora que he "conocido" a Samu, puede que empiece a entenderla. El hecho de pensar en alguien, es algo que no me había pasado nunca, y que me pase con Samu, es algo muy importante para mí, ya que nadie lo ha conseguido hasta ahora. Además, odio los compromisos, es más, sé que en cuanto consiga que Samu esté comiendo de la palma de mi mano, me olvidaré de él <<eso espero>>.

Talía

Las tres primeras clases, como siempre, son aburridas, y teniendo en cuenta que es lunes y que he estado toda la madrugada pensando en Hero, no he dormido nada. Tengo un mal presentimiento, no me ha mirado ni una sola vez. Lo único que ha hecho es hablar con Agatha y partirse el culo. Parece ser que ahora encima, Aitor, él y ella, son un trío o algo parecido.

Mientras salgo a tomar el aire, veo que Aitor se acerca a mí.

—Oye Lía.—ya estamos con las confianzas.

—Dime Aitor.—digo mientras me cruzo de brazos.

—Hero y tú habéis hablado muy poco, ¿no?.— está claro que me ha preguntado esto a propósito, su tono es algo sarcástico y lo dice con malicia.

—No lo sé Aitor, ¿a qué viene esto? ¿me lo podrías explicar?—digo desconcertada y sin ganas de discutir.

—Creo que es normal. Hero no tiene nada serio con nadie, y justo tú, no vas a ser la excepción.—dice levantando los brazos y riéndose.

—Está bien.—Lo que más me duele, dejando de lado todas las duras palabras que me ha dicho, es que tiene razón. ¿Cómo se va a fijar un chico como Hero en mí? ¿Por qué va a cambiar un chico como él por mí?. Es totalmente imposible. Tiene miles de chicas con las que puede tener solo un maldito rollo, ¿y se va a pillar por mí? Es imposible y me duele. Corro hacia el baño y no puedo evitar que se me caigan las lágrimas de los ojos por el camino.

Justo cuando cierro la puerta, escucho que entra Agatha con su mejor amiga Joana, pero no entiendo de lo que están hablando.

—Es muy fuerte que se liara con ella en la fiesta y luego follara contigo en el mismo sitio.—dice Agatha riéndose a carcajadas.

—Ya te digo, lo peor es que ella ni lo sabe.—dice Agatha después de reírse a carcajada limpia.

—En fin, no veas como folla Hero.—añade Joana.

—Además, creo que se la follo en el instituto hace unos días o ayer mismo, no me acuerdo.— mi corazón empieza a latir fuertemente y comienzo a agitarme.

—No me lo esperaba de Talía, parecía una mojigata, está claro que estaba confundida. ¿Tu crees que van a llegar a tener algo serio?—¿mojigata?

—No creo, pero aun así, Hero tiene que ser tuyo, sólo para joder a Talía.—dice Agatha con un tono serio.

—Sin duda, es una pringada, y siempre lo será.— le responde Joana, y a continuación, se van.

Ahora mismo, siento que me estoy hundiendo, y que por más que intento no caer, caigo siempre. Como he podido ser tan idiota. Esa noche me fui mal, y estuve llorando por él, incluso más que ahora, y él... ¿él se estaba follando a otra? Ahora mismo siento que no voy a poder salir de esta, no se como voy a salir como si nada del baño. Voy a tener que verle la cara durante los próximos meses, a él, a Joana y a la dichosa Agatha. Entiendo que Joana le llame la atención mucho más que yo, ya que ella con solo contonearse tiene todas las miradas puestas en ella. Tiene unos ojos marrones y grandes, una piel lisa y perfecta, el pelo largo y rubio... En fin, siempre que siento que todo va bien, llega algo que lo estropea todo.Pensaba que Hero era diferente, creía que él jamás me haría daño.