𝐃𝐞𝐬𝐜𝐞𝐧𝐝𝐢𝐞𝐧𝐭𝐞𝐬:𝐃𝐍𝐀 (#𝐃𝐁𝐌𝟐)

Capítulo 14: Hogar, amargo hogar

Desde que comencé las clases no estado muy activa, pero hice todo lo posible por tenerles este capítulo antes del final de la semana.

Será la primera vez en esta historia que estarán en la Isla así que será interesante🍎

Espero que les guste este capítulo.

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Mal's POV:
Llegó el día, hoy por fin iremos a la Isla de los Perdidos. Y sé que será raro luego de más de tres años sin haber ido y con las modificaciones que se han hecho, pero en serio espero que todo salga bien.

Hicimos todo lo posible por convencer a Evie para que no viniera por el bienestar de ella y de Emma. Tanto Ben como Doug, Jay, Carlos y yo lo intentamos y no logramos nada. Puede ser igual o más terca que yo cuando se lo propone. A pesar de eso, es su decisión y nadie puede quitarle ese derecho.

De igual manera, todos iremos en una limosina y la Guardia Real de Auradon irá en dos autos más pequeños. Uno atrás y otro adelante de nosotros.
Ben y yo tomamos prevención de todo. Tanto los guardias como nosotros llevamos espadas en caso de que se necesiten.

Ya nos informaron que tanto la guarida como el Castillo de las Gangas están totalmente deshabitados. Nos repartiremos entre ambos lugares. Al parecer, Jafar dejó de vivir en la tienda que está en el primer piso de mi antiguo hogar y ahora vive junto a la madre de Evie en el Castillo al Otro Lado.

Este viaje será para intentar arreglar las cosas con nuestros padres, averiguar qué fue lo que pasó realmente antes, durante y después de la coronación de Audrey y ver cómo ha ido progresando todas las proclamas que hemos hecho para las mejoras en la Isla. Yen Sid ha estado en contacto con nosotros para mantenernos al tanto de todo, pero queremos verlo con nuestros propios ojos.

Siendo sincera, tengo muchas emociones encontradas en estos momentos. Veré a mi papá frente a frente por primera vez luego de lo que pasó. Estoy nerviosa y algo asustada. Y también estoy triste por dejar a los niños acá.
En estos dos meses y medio nunca los hemos separado de nosotros por más de seis horas. Lo único que me tranquiliza es que sé que estarán bien y seguros con los padres de Ben.

Los demás ya habían subido a la limosina, una lo suficientemente grande para que todos cupiéramos, y los únicos afuera de ella éramos mi esposo y yo. Acaricié los rostros de mis pequeños y besé sus cabecitas, Ben imitó mi acción.

Nos miraban con curiosidad por nuestra vestimenta. Lo más parecido a ropa de la Isla que me han visto son mis prendas con cuero. Nunca nos habían visto a ambos vestidos así.

-No tienen que preocuparse por nada, los estaremos cuidando todo el tiempo y les diremos cómo están cada ciertas horas-nos aseguró Adam.

Ni a Ben ni a mí nos agrada la idea de dejarlos aquí, pero es lo mejor por su seguridad. Tomé aire para intentar no derramar las pocas lágrimas que amenazaban con salir de mis ojos. Ben apretó mis hombros y besó mi coronilla para relajarme.

-Entendemos por lo que están pasando en este momento chicos, es lo más normal-dijo Bella apretando nuestras manos- Ustedes pueden estar tranquilos, los verán más rápido de lo que creen.

Uno de los guardias llegó a nuestro lado.

-Disculpen la interrupción, majestades. Ya todo está listo para partir.