~ SƐƇŔƐƬ Ŀ🖤ѴƐ ~ [Mikenix]

《💫》Taquilla《☕》

{< Narración >}

Mientras caminaban y hablaban, el pasillo estaba en silencio, haciéndose así eco de la voz de Mike que le hablaba a Acenix.

Las taquillas rojas estaban siendo observadas por Acenix, el cual estaba preguntándose que guardaría la gente ahí, aparte de los libros de texto y libertas.

Mike: - Y así fue como descubrí que era... un cocodrilo del zoo el que se había salido de su recinto y tuve que correr por salvar mi vida, lo cual es un poco malo ahora que me doy cuenta, porque bueno, había niños y eso. Pero total que...

Aunque el canuno contaba cosas interesantes, el gato escuchaba pequeñas partes mientras observaba las salas, taquillas y tablones para apuntarse a actividades. Lo cuál hacia sin querer, pero que sin querer se le iba la concentración en la conversación y pasa a mirar otra cosa diferente

Mike: - Y entonces fue cuando me comí una enorme... tableta de chocolate y... ¡Ala, no me acordaba de esto!

Acenix: - Emn?

La mirada de Acenix se dirigió hacia donde miraba su acompañante, lo cual era una sala que daba a unas duchas de hombres

Acenix: - ¿Te sorprende una sala de duchas?

Mike: - Vente y calla, que esto será divertido de mirar...

Acenix se mostró un poco nervioso, aunque a la vez curioso

Al mirar por la ventana de la puerta vieron a... ¿Trollino besándose con una chica?

Ambos estaban besándose apasionadamente, y pasaron al siguiente, paso cuando la chica se volteó y levantó su falda, para que Trollino se bajase los pantalones

Acenix: - ¿Mike? Creo que no deberíamos estar aquí, aunque sea detrás de la puerta...

Mike: - ¿Que pasa que le tienes que quitar lo divertido a las cosas?

Acenix: - ¡Pues no, pero esto no creo que sea moralmente bueno!

Después de eso se tapó la boca y miro con pupilas pequeñas a Mike que lo miro entre enfadado y con miedo por el ruido. Quedaron ambos quietos y se echaron cada uno a un lado diferente de la puerta, quedando en silencio por la puerta

Trollino: - Creo que alguien está por aquí, ponte la falda...

En ese momento supieron que iba a ir en dirección a su puerta, y decidieron esconderse en una taquilla, que lo que Acenix estuvo un poco contraído a ello

Acenix: - Mike, no cabemos en esa taquilla...

Mike: - No tenemos tiempo para esto, ¡entra! -Grito en susurro-

Acenix seguía sin querer meterse, pero Mike le cogió de la mano y le atrajo hacia él para entrar en la taquilla y cerrarla, quedando ellos a oscuras y con sus cuerpos muy pegados. Mike tenía la cabeza de Acenix en la barbilla, mientras que el gato tenía el pecho de Mike en su cara. Sus cuerpos estaban en roce y no se podían mover de ahí, estaban inmóviles y muy juntos