Part 2.

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El paso del tiempo abrazó a los socios con evidente monotonía. Sus horarios establecidos fueron el núcleo de su fatiga a medida que las semanas se acumulaban dentro de sus bolsillos. Sin embargo, acostumbrarse significó un gran alivio para los dos en cuanto sus esfuerzos brindaban frutos y el asombro de los monarcas se convertía en un reto a superar luego de una serie de funciones efectuadas dentro de la corte, entonces se vieron obligados a renovar otra vez y el desgaste mental los envió a pasear más frecuentemente fuera de los confines del castillo en busca de serenidad. Y aunque solían verse victoriosos en sus metas de forma mayoritaria, existió un nuevo detalle que perturbó la convivencia del felino y el duende; Jevil se sobresaltaba mucho cuando Seam trataba de llamar su atención con un toque, y el hablarle de cerca terminó convirtiéndose en un tabú para los dos cuando en una ocasión su cabeza se desprendió dejando colgar su cuello de resorte sorpresivamente y Seam saltó como nunca mientras se erizaba y siseaba. Acordaron mantener distancia al percatarse que esta situación se repetía sin importar cuántos métodos impusieran y, si los hacía pasar malos momentos, tendrían que ponerlo en práctica aún si esto terminó deprimiendo considerablemente al bufón aunque tampoco se atrevió admitirlo en las charlas espontaneas que compartían al respecto. En la actualidad volvían de una actuación teatral que Jevil había sugerido realizar ante sus reyes para salir fuera de la aburrida rutina que inconscientemente daban seguimiento. Seam detestaba el maquillaje y vestirse de formas estrafalarias pero se sometió a la propuesta de su amigo ya que le había visto algo decaído las últimas horas, más eso no evitó que se quejara continuamente de su apariencia antes y después del espectáculo, tirándose a la cama en medio de protestas para relajarse con la sensación que sólo podía ofrecer una superficie esponjosa como ese colchón. Jevil se carcajeó pero lo hizo disimuladamente, y esto lo desconcertó, pues usualmente no se habría avergonzado de mofarse de su compañero cuando se comportaba de aquella manera, se daba cuenta que el distanciarse también lo estaba volviendo mucho más cohibido y tal lo consideró inaceptable. Esto no podía continuar así. Con una nueva resolución palpitando en su anatomía, Jevil se acercó flotando a la posición de su compañero, sintiendo al pánico acentuarse pero no permitió que este hecho lo intimidara y alejara de su objetivo. Abrió la boca para hablar pero no fue Seam quien emitió el primer sonido al ambiente.

—Por cierto, Jevil —Seam abrió un ojo para mirar al bufón, quien retrocedió levemente como acto-reflejo, mordiéndose los labios sin dejar de prestarle atención a su preciado compañero—, noté que el rey de diamantes estaba menos ruidoso hoy cuando fue tu turno. Y me pareció extraño ya que usualmente es el que más se entusiasma contigo.

—¿Lo estaba, estaba? —cuestionó. Jevil no se había percatado, pues su concentración osciló en su trabajo y en los gestos de Seam así que no se había permitido el capricho de ver el efecto que su acto estaba teniendo en los reyes.

—Si me lo preguntas, creo que deberías buscar bromas nuevas. Las que tienes están bien pero debes recordar que estamos hablando de los monarcas, si una actuación les parece aburrida esto se verá reflejado en nuestra recompensa.

—Bueno, bueno, la verdad es que a mi también me pareció que estaba siendo muy repetitivo, repetitivo —explicó—, por eso quise hacer esta obra. Aunque gracias por notarlo, Seam. Si no me lo hubieses dicho seguro habría retrasado más el desarrollo de mi proyecto.

—¿Proyecto? ¿Y qué clase de proyecto es? —quiso saber el felino, intrigado.

—¡Caos, Caos! —exclamó Jevil con entusiasmo—. Ese es el tema principal de mi proyecto. Quiero que toda la función pierda su orden y ocurran acrobacias en el momento menos esperado así como las bromas y otros actos. ¡Estoy convencido que será un gran impacto para toda la corte, corte!

—Humm, no es una mala idea —comentó Seam en tono meditabundo—, pero si un espectáculo no tiene orden, ¿no crees que el resultado sea todo lo contrario de lo que esperas lograr? Quiero decir, puede ser impactante, es cierto, pero sólo será eso... dudo que esto cambie la perspectiva del público aún con todos los preparativos.

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