Se levantó sin ganas, ni siquiera necesitaba alarma para despertase, ya que casi ni dormía por las noche, padecía de un fuerte insomnio, y eso le afectaba. Clara mente no se lo Hiba a decir a su hermano, aún que el lo tomara tranquilamente y le prestaría ayuda en lo que pudiera, el azabache menor no quería que se preocupara por el.
Esos meses había notado que su salud mental había decaído, no tenía ningún propósito para existir, para seguir respirando. El siempre creyó que si tenías alguna meta en tu vida Hiba a prosperar, Hiba a ser feliz y saludable, pero... Nada, no había nada, sólo un par de ojeras formadas por estar hasta la cinco de la mañana llorando en su habitación, recordando cosas felices de su pasado, y pidiendo desesperadamente que esos sentimientos vuelvan. Extrañaba demaciado a su madre, la quería devuelta, quería sentir en su piel ese calor que la caracterizaba tanto, quería ver de nuevo su hermosa sonrisa, holer su aroma dulce a lavanda, intuir ese aura que emanaba de tranquilidad hogareña, rogaba por algún día sentir eso de nuevo, pero, aunque le doliera, tenía que afrontar que nunca Hiba a sentir eso, tenía que admitir lo, estaba tan quebrado por dentro, será presentada en subte exterior por las marcas quejaba casi siempre entre sus muñeca cubriendo las con vendaje o con sus propias mano , sabía que estaba mal pero que lleva esperar, no tenía nada porque luchar.
una de roma repentino llegó hasta sus fosas nasales, era el olor a esos deliciosos huevos fritos que cada mañana le prepara su hermano cuándo podía estar en el hogar, se vistió rápidamente procurando no rozar la tela con ninguno de sus heridas para causarle dolor, aunque ese era algo irónico.
Sasuke llegó a la cocina, se encontró con que su hermano si estaba cocinando huevos fritos, fugazmente se sirvió un enorme vaso de jugo de naranja, para acompañarlo con los huevos.
El silencio se hacía notar, para Sasuke se le hacía incómodo, había pasado tanto tiempo junto a Naruto, que ya estaba acostumbrado a escuchar una voz sumamente irritante entrando por sus tímpanos, en cambio, con Itachi no, el era un ser pasifico y silenció, siempre hablaba en lo momentos correctos, y nunca gastaba oxígeno de más contando algo. En fin, el pelinegro comió rápidamente si antes agradecerle a su hermano por el desayuno des la mañana.Después te eso agarró su bento que le había preparado el susodicho y se dispuso a irse por la puerta principal, camino hasta la academia, fue un viaje largo y silencio, ya que vivir en una esquina de la aldea no era muy conveniente, para el, era mejor ir las mañanas a casa de su rubio amigo para desayunar, no era por qué despreciaba los desayunos con Itachi, si no era por qué el hogar nunca estaba plagada de lo que el odiaba más en este mundo, el silencio, ya que su rubio amigo tenía un don que aveces le perjudicar, era muy hablador, generalmente esas mañanas de camino a la academia, se la pasaban conversando de algún tema trivial o de interés de los dos.
Tardó en llegar a la academia, pero eso no fue un impedimento para que sea un de los primeros en entrar al salón. Se sentó justo en el aviento dónde había estado más de seis años, puso su típica postura, que el consideraba cómoda, y se puso a meditar, por varios y largos minutos, Hasta que se dió cuenta que una multitud de chicas de su edad rodiaban todo el contorno de su pupitre, y solo se limitaban a observarlo y saludarlo de la manera más dulce que podría hacer cada una. Eso a Sasuke le incomodaba, odiaba estar rodeado de gente que no le conocía ni importaba, le daba tanta anciedad, que al tratar de canalizarla casi se hace una cortada en la mano con su propia uña.
Los minutos pasaron como horas, escuchaba los suspiros de todas la chicas a su alrededor, pero por fin pudo tener algo de tranquilidad al ver que su mejor amigo entraba por la puerta de principal del salón, se veía somnoliento pero siempre con ese ánimo que el desearía tener cada mañana, rubio se dirigió hacia el azabache, intentado arduamente pasar entre la espesa multitud de chicas que rodeaban al chico. Cuando por fin el ojiazul logro pasar esa masa de hormonas, se pudo sentar al lado de su amigo, los dos chocaron los puños para luego tener una ligera conversación antes de que comiencen las clases.
Otros minutos pasaron e iruka sensei entro al salon, dio una introducción a la actividad de selección de equipos, y censillamente empezó a nombrar a sus alumnos. Todo estaba tranquilo todavía no escuchaba su nombre, hasta que lo pudo oír, fue después del nombre de de el de su mejor amigo, y eso lo hacía calmarse un poco, luego escucho el nombre de otra de sus compañeras, si más bien recordaba que se llamaba Sakura, esa chica le producía nada más que indiferencia, era bonita, eso no lo podía dudar, pero el creía que no tenía tiempo para pensar en esas cosas. En fin, el con su amigo la miraron y ella sonreír muy dulcemente. Sasuke sabía que esto se iba a poner muy interesante.
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Hola, soy la autora, y quería decir que perdón por subir capitulos tan lento, y perdón por las faltas ortográficas, es que mi ortografía es como el orto. También que los siguientes creo que se tardarán un poco, y.... Gracias por leer mi historia <3
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HOMETOWN |•naruto•|
FanfictionSimplemente. Otra historia de Naruto sin rumbo, con los personajes con personalidades cambiada, sucesos cambiados, y fundamentos para los ships. Pero, "entretenida" y con una redacción "decente". Así que te invito a leerla, tampoco está tan mal, la...