Pareja Perfecta

CAPÍTULO 1

Blair

Otro año en el instituto Clark, preparo mis cosas para el día de mañana, cepillo mi pelo y hago una pequeña trenza.

Tengo mucha emoción para entrar al instituto, excepto por la parte de ver al idiota de Noah, Noah Miller, mi "rival" por así decirlo.

Si yo era buena en matemáticas, él también lo era, si yo me inscribí a fútbol, él también lo hacía, no cabe duda que a Noah se le da todo perfectamente bien.

Sinceramente no me gusta interactuar con él.

Me veo al espejo, mis ojos azules cubiertos de máscara de pestañas y mis labios de color rojo intenso. Veo las curvas de mi cuerpo, acompañadas por mí revoltoso cabello negro con la trenza.

Muchos me han dicho ser la diosa de la escuela, pero... ignoro el pensamiento y me voy a mi cama a dormir.

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Despierto y voy directamente a la sala del gimnasio. Mi madre también está allí.

-Hola Blair.

-Hola mamá.

- ¡Mírate!, necesitas bajar de peso cariño, estás muy... gordita.

-Si mamá- contesto.

Empiezo a realizar mi rutina diaria, hago 45 minutos de cardio y tonifico mi cuerpo con pesas.

Termino demasiado cansada y me quito el sudor de la cara con una toalla.

-No aguantas nada Blair- me mira con cara de decepción.

-Si mamá, lo sé.

Ignoro lo que dice y voy a mi cuarto, como si nada hubiera pasado.

Tomo una ducha, me visto con el uniforme del instituto e inmediatamente aparece una sonrisa en mi rostro.

Comienzo a maquillarme, me coloco un delineado negro, sombras de ojos, rubor y lápiz labial de color rojo, está vez, quitando la intensidad de ayer.

Bajo las escaleras y saludo a nuestra querida Cecie.

-Buenos Días Cecie- digo con alegría.

-Buenos días señorita Blair- responde con una sonrisa- ¿Le preparo el desayuno?

-No, muchas gracias.

-Ok señorita... adoro que no sea como su madre.

Solo me limito a asentir con la cabeza y sonreír.

Me hago un omelette, también una ensalada de frutas y un vaso de jugo de naranja. Obviamente le hago lo mismo a Cecie.

-Cecie.

- ¿Sí? - dice con un trozo de sandía en la boca.

Mi madre va bajando las escaleras.

- ¡No hables con la boca llena Cecilia!

Estoy demasiado sorprendida por su actitud.

-... ¡Haz lo que se te pida! ¡Tú hora para desayunar es a las 11:30am!

-Mamá, fue mi culpa...- digo rápidamente tratando de arreglar las cosas.

-No.... tranquila señorita Blair, yo lo arreglo.

-Yo le dije a Cecie que hiciera eso.

- ¡Maldita niña maleducada! - me asustó por un momento.

Mi mamá se acerca hacia el desayuno de Cecie y lo tira a la basura.

Me estoy muriendo de coraje, quiero gritarle a mi mamá, pero no puedo, al fin y al cabo, es mi madre. Tengo que hacer algo...