El Ordinal Kayn

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El gran ordinal Shieda Kayn, volvía al imperio Demaxiano después de una larga travesía en busca de la tripulación de la Morning Star, ya que estos habían osado en tomar algo que a el le pertenecía, la manera en el que podría tener control absoluto sobre el ora, la templaria que le ayudaría o mas bien obligaría a que le ayudara en su plan, pero gracias a esos malditos su plan se fue a la basura.

A buscado por 150 cuadrantes a la tripulación pero pareciera que se los había tragado un agujero negro, no había rastro alguno de ellos, es como si ellos nunca hubieran existido y eso hacia que a Kayn le herviera la sangre, la impotencia que sentía al ver los resultados que estaba teniendo lo hacían poner en duda si era merecedor del titulo de ordinal.

R: Oh vamos Kayn, El gran Ordinal del imperio Demaxiano, no puede encontrar a unas viles cucarachas, que patético -Menciono este con un tono burlesco ocasionando que rabiara aun más Kayn-

K: No te puedes guardar tus estúpidos comentarios para alguien que realmente le importen? -Cuestiono este a la guadaña-

R: La verdad duele, eres un completo inútil, como es posible que después de meses de búsqueda no hayas encontrado ni un solo rastro de esas ratas, si tan solo me dejaras a mi hacerlo desde hace mucho tiempo los habríamos exterminado -Menciona la guadaña en un tono molesto- 

K: Rhaast, acaso crees que soy estúpido como para dejarte tener control absoluto de mi cuero?

R: Lo de estúpido tienes razón porque viendo lo que te a pasado lo deja muy claro.

K: Sabes me estoy cansado de estar discutiendo con una estúpida arma como tu -Menciona este ya muy molesto por la impertinencia de Rhaast-

R: Entonces porque no me regresas de donde me encontraste?. Sabes perfectamente que te soy de mucha utilidad pero no quieres aprovechar el poder que puedo explotar de ambos.

Kayn era consciente que si dejaba que Rhaast tuviera control de el tendrían un poder asombroso pero al hacer esto perdería él el control y era algo que él no estaba dispuesto a permitirle, el tenia que encontrar la manera de lograr poseer el gran poder que se hallaba en Rhaast, pero él teniendo el control absoluto sólo necesitaba encontrar el modo.

Kayn dejo en su alcoba a la guadaña parlanchina, y procedió a ir a los jardines del castillo del Rey Jarvan IV, era una vista del espacio hermosa, las constelaciones brindaban un expectaculo tan hermoso que cualquiera que estuviera con un ser amado brindaría la ocacion para que esas almas dieran paso a ser solo una con el universo, se podía palpar la paz y tranquilidad que provenía de aquel lugar. Le parecía raro a Kayn que nunca viniera gente al jardín ni si quiera el mismísimo Rey, pero era algo a lo que no prestaba demaciada atención ya que si fuera un lugar demaciado concurrido no le ayudaría a despejar su mente.

 Kayn aun se seguía preguntando quienes eran los de la tripulación, ya que todos eran conscientes que meterse con el era un estupidez y buscar la muerte segura, pero este grupo tal vez no eran consciente de ello o lo eran y aun así osaron a arruin...

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 Kayn aun se seguía preguntando quienes eran los de la tripulación, ya que todos eran conscientes que meterse con el era un estupidez y buscar la muerte segura, pero este grupo tal vez no eran consciente de ello o lo eran y aun así osaron a arruinar su plan, en cualquiera de los dos casos el no dudaría en acabar con ellos, pero había algo que no lo dejaba de molestar y era el piloto de esa nave, pareciera ser un experto ya que este fue capaz de esquivar todos los ataques que este les lanzaba hacia su nave y hasta logran contraatacar en varias ocasiones y en una de ellas lograr escapar sin dejar rastro, esto le causaba cierta intriga ya que debía ser alguien muy experimentado dado al nivel que había mostrado, tal vez era un militar o un ex-militar, estaba deseoso de saber quien era aquel sujeto y tal vez podría perdonarle la vida a cambio de ofrecer "voluntariamente" su trabajo a el.

K: *Soy mas inteligente que estas ratas así que tengo que pensar donde podrían estar o a donde podrían ir*-Se decía estos a si mismo aprovechando la tranquilidad del lugar, el cual le hizo cuestionarse una cosa- *La templaria hasta donde se ella es portadora del Etwahl, pero ¿Cuándo se fue con ellos lo llevaba consigo?*- esto hizo reaccionar a Kayn yendo nuevamente a su alcoba donde se es encontraba Rhaast-

Rhaast al ver a Kayn se pregunto que era ahora la estupidez que se le pasaba por la cabeza.

R: Que demonios te pasa Kayn. -Dijo este un un  tono serio-

K: Rhaast, ¿Recuerdas a ver visto a la templaria con un algún tipo de arma cuando paso aquello? - Rhaast se sorprendió al ver que a Kayn preguntando aquella tontería -.

R: No lo se -Conesto cortante-.

K:Aagg!! Tuviste que aver visto si traía algo consigo o no!!! -Menciona este ya exaltado-.

R: Pará empezar eso ya pasó hace algunos meses y puede que se me haya olvidado, y lo que me causa más conflicto en este momento es... PARA QUE DEMONIOS QUIERES SABER ESA ESTUPIDES AHORITA!!!! Acazo eso nos ayudará a encontrarla??.

K: Puede darnos una pista de donde podría llegar. -Rhaast aún seguí creyendo que era una tontería y procedió a responder ya que tal vez Kayn tenía razón y esto serviría para encontrar a la templaria.

R: No llevaba nada, solo recuerdo el cabello del sujeto que la llevaba consigo en brazos.

K: Esto es muy bueno Rhaast, porque si no la lleva consigo eso significa que tendrá que ir por ella.

R: Por fin usas la cabeza, vaya logro, pero ¿Donde ira por ella?.

K: A la orden templaria.

R: Entonces....

K y R: Sera nuestra oportunidad!!!!


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