A pesar de que Félix me había hecho reír y me había alegrado el día no podía dejar de sentirme culpable, llame a Sun. De seguro está devastado con todo lo sucedido. No contesto así que fui a su casa para ver cómo estaba, lo quiero como un amigo a pesar de todo.
Cuando la iba a tocar el timbre escuché su voz y la una chica.
- No se porque te duele, la llevas engañando más de un mes - hablo una voz femenina.
- Por estúpido, a lo mejor se dió cuenta y no se quiso casar, si la engañe pero era solo por placer .
- No querías su herencia, por eso te estabas cansando con ella, no debías enamorarte. Te ibas a divorciar cuando ella te de su herencia. Ese era el plan.
Retrocedi unos pasos, camine sin rumbo, mi celular no dejaba de sonar, lo apague. Entonces casi me caso con un farsante, ¿por que siempre me deben hacer daño? ¿porque no me quiere por como soy?, lo único que todos han querido es mi dinero.
Fui al bar que sabía ir siempre, entre y los sonidos de música a todo volumen hicieron que me ponga en ambiente, fui a la barra no me importaba si me emborrachaba o no, lo único que quería era olvidar todo.
Tenía una buena resistencia al alcohol, ya estaba en el décimo shot, cuando recibo una llamada entrante de mi hermano.
— ¡¿Donde demonios estás?!
— Amm en un bar, si, eso ¿Por qué?
— ¡UN BAR!
— Si, un bar ¿Que quieres Hyunjin?
— ¡HYE JIN ACASO NO HAS VISTO QUE HORA ES! ¡SON LAS TRES Y MEDIA DE LA MADRUGADA! ¡¿CON QUIÉN ESTAS?!
— Sola, no te preocupes estaba por ir a casa.
— Te quiero en quince minutos.
Corte y guarde el teléfono en el bolsillo de mi campera. Pague lo que había bebido y salí del lugar antes de que se hagan las cuatro de la madrugada y mi hermano me mate, bueno lo va a hacer pero no con tanta violencia.
Estaba por llegar a casa cuando recibo otra llamada; Félix
— Tú hermano me dijo que estas en un bar, dime la dirección y te voy a buscar.
— No hace falta, ya estoy llegando a casa
— ¿Estás llorando?
— No, solo es el frío y la alergia que me da cuando hace mucho frío, si eso.
— Bien, no puedes dormirte todavía iré a tu casa, quiere verificar que estes bien.
— Félix no es nece.....
Me dejó con las palabras en el aire, me había cortado la llamada. Suspiré y seguí mi camino, al llegar a casa trate de hacer el menos ruido posible, no quería ser regañada por Hyunjin, lo conozco y es como un padre cuando se trata de mi, básicamente me habla de el peligro para una mujer de andar sola por las calles a estás horas de la madrugada.
Oh, mierda.
— No que ya estoy saliendo — dijo mirando el reloj.
— ¿Estuviste contando el tiempo? — pregunté, asíntio con la cabeza.
— No te diré estás castigada, no soy como papá o mamá pero debes tener cuidado a estás horas, Hye no es bueno que andas sola por esos lugares.
— Pensé que me dirías algo como; no puedes salir dentro de una semana o una chica que ya tiene trabajo se sigue portando como una adolescente de 16 años — bufé.
— Vivimos en la misma casa y no es necesario decir eso cuando tú sabes lo que está bien o lo que está mal.
Sonreí y lo abrace, ¿Debería contarle por qué fui?
— ¿Estuviste llorando? — lo mire rara
— Oh, vamos , todos me han dicho eso.
— Te conozco, y si estuviste llorando — suspiré y comencé a contarle todos lo hechos y el por qué de mi repentina desaparición de casi cinco horas.
No pensé que reaccionaria de esa manera, se levantó enojado y fui a tomar un vaso de agua para calmar sus humos. Sus ojos se veían cristalinos, no pregunte hasta que se volvió a sentar a mi lado.
— Tu eres la única que no sabe la verdadera razón por la cual nuestros padres murieron.
— Habían muerto por un accidente, esa es la verdad ¿No?
Negó con la cabeza.
— Es hora de que sepas la verdad.
— Hyunjin, me asustas — lo mire a los ojos.
— Nuestros padres habían ido de viaje de negocios, nos habían dicho que habían muerto por un choque, no fue así, se habían salvado. Pero la verderas razón es que nuestros padres tuvieron que delatar a los de su empresa por el lavado de dinero, venían escapando pero esa gente fue más rápida, se chocaron con uno de ellos y cuando salieron del auto a pedir ayuda les dispararon a los dos. Tú tenía doce años y decirte que Nuestros padres fueron asesinados no era una buena idea.
— ¿Con quiénes trabajaban?
— Con los padres de Sun-oh.
— ¿Que?
Dai-n.
ESTÁS LEYENDO
ℂ𝕆ℕ𝕊𝕋𝔼𝕃𝕃𝔸𝕋𝕀𝕆ℕ: 𝑳𝒆𝒆 𝑭𝒆𝒍𝒊𝒙
Phi Hư CấuTus pecas son como las estrellas con la diferencia que, las estrellas brillan en el cielo y tú pecas brillan en tu rostro. Siempre se lo recordaba pero se dejó llevar por los demás y terminó por lastimar a la persona que nunca lo abandonó cuando más...