【 I Like You Very Much 】

III

Tomó una gran cantidad de aire y comenzó a guardar unas cuantas cosas en la bodega, unos cuantos balones que se habían quedado fuera a la hora de guardar.

Ushiwaka se acercó a él y le tocó el hombro, llamando su atención.

- Oh, ¿Sucede algo Wakatoshi?

- ¿Quieres que te ayude? No tengo prisa en irme a casa.- Se había colocado ya el polerón del equipo y estaba subiéndole el cierre.

- No no no. Tú ve y descansa, yo termino aquí y me voy.- Sonrió gentilmente, posando ambas manos en los hombros contrarios.

- Me podría quedar, de veras.

- Wakatoshi-kun, te estás preocupando demasiado por mí y, lo que me voy a quedar haciendo no me va a causar ningún daño.- Sonrió con levedad.- Así que, toma tus cosas y vete de aquí.- Lo volteó y comenzó a empujarlo hacia la salida.

- Me estás pidiendo demasiado, Tendou.- Replicó tranquilo, saliendo por la puerta que los otros habían dejado abierta.- No puedo solo... Dejar de estar preocupado por tí.- Admitió, observando la cara sorprendida del pelirrojo.- E-eres... Muy descuidado.- Añadió rápidamente.

- Lo sé, y torpe. Pero aún así no hay nada de lo que preocuparse, ¿Okey? - Estiró su brazo y revolvió el cabello del más alto y, se volteó.

Ushiwaka suspiró y tomó sus pertenencias, despidiéndose una última vez de Tendou.

Avanzó un poco por el pasillo y chocó con unos, ¿Estudiantes? Los observó extrañado y continuó su camino.

- Está lloviendo muchísimo.- Habló uno.

- Será mejor que agarremos unos paraguas cuando terminemos aquí.- Le respondió otro.

El peliverde no entendió de una a que se referían, ¿"Cuando terminen ahí"? ¿Qué irían a hacer al gimnasio? Las clases ya habían terminado y no se encontraba nadie en el colegio. Era bastante, sospechoso. Pero no era de su incumbencia y no tenía por qué meterse en problemas ajenos, pensó.

En eso vió a su al rededor y, notó que aquellos estudiantes tenían toda la razón, no traía paraguas y su chaqueta se había quedado en la banca del gimnasio, a pesar de que se iba a ir en auto a su hogar.

- Al menos no salí del colegio aún.- Susurró para sí mismo, después de todo ambos establecimientos estaban uno al lado del otro.

Dió media vuelta y apresuró el paso, ¿Satori seguiría ahí? Quizá... Podría hacer de esto una excusa para verlo una vez más, pensó y luego sacudió un poco su cabeza.

Al estar acercándose a la entrada se dió cuenta que, ésta misma estaba abierta de par en par y dentro se oían unas cuantas voces, aquello le extrañó.

Se adentró sigilosamente y la imagen frente suyo le había dejado sin palabras, totalmente desconcertado.

- ¿Cómo siquiera te soporta la gente? Eres un fenómeno.- Decía uno de los estudiantes que Ushijima había visto antes, a lo que empujaba fuertemente al pelirrojo, logrando que cayera y quedará sentado frente a él.- Eres desagradable.

- Dawon míralo, sigue sonriendo... ¡Dale una buena golpiza para quitarle esa burlona sonrisa de su rostro, es fastidiosa! - Exclamó uno de baja estatura comparado a los otros dos, mientras retenía ambos brazos de Tendou, quién sonreía... Melancólicamente.

- Ésto va a ser divertido...- Murmuró Satori, con cierto sarcasmo en su tono. Ese comentario, disgustó aún más al supuesto "Lee Dawon", un estudiante de uno de los cursos que se íba a graduar.

Lanzó un golpe al rostro de Tendou, logrando romperle el costado del labio inferior, el anterior nombrado escupió algo de sangre, sorprendentemente mantenía su característica sonrisa.