Strange

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Todos estaban ocupados en la torre de los vengadores, Laila y Natasha estaban haciendo los preparativos para la boda. Bruce estaba en el laboratorio estudiando el vídeo que la castaña le había dejado sobre las gemas del infinito. Thor y Steve estaban en el gimnasio de la torre y Clint se encontraba en las instalaciones de S.H.I.E.L.D.

Tony estaba descansando en la sala, su mente estaba tan ocupada en el asunto de Laila, ¿contarle o no? ¿Cómo lo tomaría?, aunque pensándolo bien cuando alguien sacaba a relucir el tema del supuesto padre de Laila, su semblante cambiaba.

Se iban a casar en unos días... sintió un beso en su mejilla.

- ¿en qué tanto piensas, amor?-

-siéntate a mi lado-

-¿necesitas que hablemos?-

-te quiero a mi lado-

Steve se sentó en el lado derecho del sillón y Tony se recostó en su pecho. El rubio acariciaba sus cabellos, el ambiente se volvió cálido.

-tengo algo que contarte-

-dime lo que desees-

-vamos a contraer matrimonio en unos días, no quiero que existan secretos entre nosotros; el padre de Laila-

-Tony, no es necesario que me digas quien era ese hombre, me importa nuestro presente y el futuro-

-no existe ese hombre-

-¿se murió?-

-no idiota, Laila no es mi hija biológica, por lo tanto no conozco a los padres de Laila-

Steve se quedó callado ante la sorpresa de la confesión, el castaño se volteó y lo encaro- ¿todo bien?-

-me sorprende la noticia, pero eso solo me convence más de que eres una hermosa persona por dentro y por fuera-

-quiero contarte todo sobre mí, todo lo que no te conté pero debía-

-¿de verdad no conoces a los padres de Laila?-

-solo a su padre, un viejo amigo que hace tiempo no veo; de hecho Laila tiene más comunicación con el-

-no te preocupes, esto no cambiara nada en cuanto a mi relación con Laila-

-lo que si te voy a pedir es que no le digas a Laila que te conté, si ella desea decirte, bien; pero no quiero que le menciones el tema- le dio un piquito- te cuento esto, porque entre nosotros no debe haber secretos-

-jamás habrá secretos-

Ambos compartieron un tierno abrazo, Tony ahora acariciaba los cabellos rubios y Steve reposaba sus labios en el cuello del contrario- jamás-

...

Una semana después, Pepper ya estaba descansando en su hogar y cuidando en su hija. Laila ya había acabado todos los preparativos y entrego las invitaciones a su padre para que el mismo se las diera a quien desee.

...

-Aurora, que bueno verte-

-Hola, Tones ¿a qué se debe tan agradable visita en las instalaciones?-

-te vine a entregar la invitación a mi boda-

-¡oh! Gracias, estaré puntual ahí-

-me gustaría que seas mi dama de honor-

-¿de verdad?- pregunto emocionada- nunca fui una dama de honor-

-¿entonces qué me dices?-

-por supuesto que sí- le dio un abrazo- si yo fuera tú, voltearía disimuladamente- susurro en su oído

Tus ojos azules  [Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora