Capítulo 2

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Estaba de pie frente a la gran mansión de los Lawrence, había gente por doquier. Entré y divisé entre toda la multitud a Cloe, mi mejor y única amiga, -¡Que raro!--pensé, ella me dijo que no vendría. Empecé caminar hasta allí , entre medio de todos esos cuerpos sudorosos bailando, hasta que alguien tiró de mi brazo, haciendo que me dé vuelta, encontrando a Chad,  capitán del equipo de Rugby, mirándome lujuriosamente.

-¿Qué te pasa?- Le pregunté irritada

Se acerco a mi oído y dijo en un susurro: -Estás muy bonita - Su tono era seductor, pero a mi no me provocaba nada y menos con el olor a alcohol que emanaban sus poros.

-Y tú muy borracho - Le respondí con su mismo tono, me zafe de su agarre y seguí caminando, buscando con la mirada a mi amiga, que ya no se encontraba ahí.

  Entré al tocador, me miré en el enorme espejo, preguntándome el motivo de la mirada que me había dejado tan desconcertada. Mi brazo dolía un poco, tenia una marca roja a su alrededor, gracias al idiota de Chad.

Arreglé mi vestido verde agua y salí.  Me dirigí a las escaleras ; no había visto a Cloe por ningún lado y eso me preocupaba un poco. Tecleé un mensaje para ella : -Clo, ¿Dónde estás?--

Y al instante ella respondió :
--En mi habitación, a punto de dormir --

¿"A punto de dormir"? ¿De verdad? ¡Esa era mi excusa!

Millones de preguntas se amontonaban en mi cabeza, y estaba furiosa. Me dispuse a buscarla hasta que al fin la ví, a lo lejos con un chico. Me acerqué sigilosamente entre la gente teniendo cuidado de que no me viera, pero yo era la que no tenia que verlos.
¿Cómo pudo? . Cloe, mi amiga , estaba besando a James, mi ex.
--Esta vez no voy a llorar - me repetía a mi misma.

Agarré mi celular y le escribí otro mensaje:

- Me olvidé de contarte,espero que estes despierta. ¡Ayer volví con James! Estamos juntos de nuevo, ¿Lo puedes creer?-- Sí, era lo más patético que se me pudo ocurrir.
Ella tomó su celular y supe que estaba leyéndolo, porque su cara de felicidad pasó a ser una de fastidio y comenzó a golpear aJames.
Me di la vuelta para irme, pero choqué con un muchacho  que derramó su bebida en mi vestido.
-Era lo único que faltaba - pensé

Corrí rápido hasta el baño y me encerré en el, las lágrimas se amontonaban en mis ojos, pero no quería largar ninguna.

Me senté en el suelo, tratando de calmarme, unos golpes suaves en la puerta me hicieron salir de mi pequeño trance. No respondí, no quería hablar con nadie. Pero los golpes se volvieron cada vez más fuertes y no lo soportaba.

Abrí la puerta y me encontré con el muchacho que arruinó mi vestido, no me había dado cuenta lo guapo que era, su pelo alborotado lo hacía ver condenadamente sexy, pero lo sorprende eran sus ojos negros, tan profundos y oscuros como la noche.

-¿Qué quieres?- Le pregunté de mala gana

-Yo...yo...Lo siento -Dijo tartamudeando, mientras se pasaba una mano por su cabello.

Quería irme de allí, ya estaba bastante enojada con el mundo.

-Está bien, te perdono -- Dije cortante y comencé a caminar...

Antes de la próxima luna llenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora