Imprevisto | Emiliaco

Te lo imaginabas?

"Date una vuelta con las manos arriba. Joaquín, te digo que te des una vuelta con las manos arriba- no escucha, yo quiero verte con las manos arriba" reclama Emilio, mientras esta sentado a lado de la botella y ve a Joaquín correr por la sala, juguetón y con muy poco equilibrio. Sobre todo para poder dar una vuelta en este preciso momento.

Joaquín se suelta riendo y por alguna extraña razón decide hacerle caso, pero a la primer vuelta se cae como un saco de papas en la alfombra y Emilio comienza a reír más fuerte, ríe hasta las lágrimas, mientras tiene agarrada la botella como si su vida dependiera de eso. No sabe cuando a bebido, no se acuerda ni de su nombre, la única cosa que sabe es que Joaquín dando vueltas es de verdad muy divertido de ver.

"Eres un torpe, mira te voy a enseñar" le propone, alzándose junto con su botella y posicionándose en el centro del salón, mientras Joaquín se arrastra prácticamente al sillón. "Yo soy buenísimo bailando, sobre todo esta canción. Gabriel y yo la amabamos" le dice Emilio mientras comienza a moverse en modo ridículo en medio de la sala.

Joaquín, que estaba bebiendo otro trago de la botella de vodka, corre el riesgo de ahogarse cuando se suelta riendo . "Como que Gabriel y tú bailaban? Me lo dices en serio?"

"Mira es divertidísimo bailar" exclama Emilio, ofendido por la manera en la que Joaquín se está burlando de él. Se acerca a él y le quita la botella de la mano- no sabe por qué lo hace, abrieron dos botellas y no están haciendo más que robarsela el uno al otro- , después se deja caer en el sillón cerca de él y tira los cojines al suelo. "Tú y Diego que hacían para divertirse?"

Joaquín se suelta riendo, de nuevo, haciendose más cerca de él y susurrandole en el oído "De verdad te lo tengo que explicar?" Y después se vuelve a reír, apoyando su barbilla en su pecho. "Diego y yo nos divertiamos mucho. En nuestro sexto mesiversario, le preparé la cena y cuando el llego a la casa hice que se sentara en la silla, me subí encima de él y comencé a besarlo, a desabrocharle los botones de su camisa y después cuando quería quitarle el pantalón me trate de parar un poco... y me había quedado atorado. Con él. El cierre de su pantalón se había atorado con el mío y fue muy divertido, por que estábamos muy excitados, queríamos tener sexo pero estábamos atorados y no podíamos saltarnos y mientras más metíamos las manos para poder desatorarnos más nos excitabamos" le cuenta, como si fuera la anécdota más divertida de la historia. El modo en que se ríe mientras se lo cuenta divierte muchísimo a Emilio, que del solo imaginar a Joaquín hacer esas cosas su propio pantalón se siente más apretado. Que extraño, es magia? Piensa.

"Ahora que lo pienso Gabriel y yo no hacíamos muchas cosas divertidas, pero yo siempre las he hecho, con él era una cosa mucho más seria" le explica Emilio.

"Ey, que cosa estas insinuando? También lo mío con Diego era una cosa muuuuy seria" protesta Joaquín y al hacerlo la botella se le resbala por la mano y un poco de vodka cae en la camisa de Emilio. "Oops, mira lo que paso."

Emilio mira su camisa y parece en estado de shock mientras lo hace. "Tengo vodka encima, Joaquín. Y ahora que hago? Nunca se le va a quitar, tendré vodka en mi camisa por siempre."

"Deja de ser tan exagerado" murmura Joaquín, soltando otra de sus risas y rodando encima de él. Pone sus piernas una de cada lado de Emilio y está de verdad muy borracho para darse cuenta que se acaba de sentar a horcajadas encima de un chico borracho y que esta un poco excitado. Le sube la camisa para quitársela. La pasa por su abdomen, sus pectorales. Mientras lo hace se siente un poco aturdido viendo todos esos músculos. Y el hecho de que esta imaginando sacándolo con su lengua no es un buen signo. "Uh, okay, ahora voy a buscar algo mío que te puedas poner. Debe ser algo horrible por que después que te lo pongas tú ya no la voy a poder usar nunca más" murmura, bajándose de sus piernas y buscando ponerse de pie.