Shizen no Yōso

#3. HASTA QUE EL CUERPO AGUANTE

El miedo empezó a apoderarse de mí, la situación era critica, un meteotito acababa de caer, había dejado incomunicada y sin electricidad a toda la isla, además, había provocado un desolador incendio en todo el bosque, y por si fuera poco, tras entrar en él por un presentimiento que tuve, estuve a punto de morir, hasta que apareció un joven encapuchado que congeló todo el incendio con una mano, pero que parecía estar loco, ya que me hablaba de dioses y peligros como si me conociera de siempre. Actualmente, estoy en frente de una extraña criatura negra con forma de humano, que está cubierta por un aura oscura y que tiene los ojos rojos y brillantes, no podría estar peor, no podemos huir, ni siquiera sé si podría confiar en aquel joven, y, por si fuera poco, tenemos que luchar con esa cosa.

YUKI:
¿Estas listo? Esto va a ser duro.

PEIBOL:
Lo sé, solo quiero saber si puedo confiar en ti, y si no estas del lado de esa cosa.

YUKI:
No es momento para eso, tenemos que trabajar juntos, aunque ganemos, ninguno de los tres saldrá ileso, todos saldremos con algo más que heridas.

Al oir eso, Peibol empezó a sudar y a pensar en una manera de huir, pero al ver nulas posibilidades, se preparó para luchar. El primero en atacar fue Peibol, quien se lanzó de frente contra la criatura, golpeando con la espada en su hombro, pero sin resultados, de hecho, el monstruo ni se imutó, respondiendo con un golpe en el estómago que rompió algunas costillas de Peibol, haciendole volar unos cuantos metros, quedando tirado en el suelo. Yuki, quedó impactado ante esto, y empezó a cargar un ataque. La temperatura empezó a bajar bruscamente, empezó a nublarse el cielo y empezó a nevar de forma intensa, pero sin darle tiempo, el monstruo cargó contra él, embistiéndole de frente y evitando que finalice su técnica.

PEIBOL:
¿Que es esa cosa? Mi espada no ha podido cortarle la carne, ni siquiera le he herido y él con un ataque nos ha vencido a los dos.

YUKI:
Es un demonio, solo puedes herirlo con un poder o una espada especial.
Ahora entiendes porque hay que trabajar juntos, ¿verdad?

Aunque me fastidiara, tenía que confiar en él, así que acepté, con la condición de que después me lo explicara todo.

YUKI:
Este es el plan, tienes que distraerlo unos segundos, si consigues de alguna forma que pierda el equilibrio o incapacitarlo de alguna manera, mejor, yo intentaré congelarlo, no podré si no está quieto, pero tardaré un poco en hacerlo, ¿de acuerdo?

PEIBOL:
¿En que parte del plan se me asegura no morir? Ese... Demonio, no me dejará acercarme a él sin apalearme.

YUKI:
No hay otra opción, haz lo mejor que puedas.

Peibol miró con cara indecisa, pero pensándolo, era verdad, no había alternativa, así que puso en marcha el plan. "Confío en ti, no me falles" dijo mientras echó a correr en dirección al demonio, pero, para su sorpresa, ya no estaba.

PEIBOL:
¿Donde está?

YUKI:
¡Arriba tuyo!

Al mirar encima suyo, vio como el demonio caía a gran velocidad, dándole apenas 2 segundos a Peibol para echarse al suelo y no recibir el golpe. Al caer el demonio, destrozó el suelo, empujando a Peibol con la onda, haciendo que se golpeara de nuevo en las costillas. Se levantó con dificultad, y tras levantar la mirada, vio al demonio corriendo hacia el, así que empezó a huir, esquivando por poco sus puñetazos. La adrenalina del momento le permitió moverse aún con los huesos rotos, entonces, Peibol, se agachó rápidamente, pasando entre las piernas del demonio y subiéndose en su espalda. El demonio empezó a moverse mucho, saltando y corriendo para intentar quitarsele de encima, hasta que se lanzó de espaldas contra el suelo, haciendo no sólo que Peibol se soltara, sino también que se rompiera su pierna izquierda. El demonio, tras quitarsele de encima, empezó a cargar una esfera de oscuridad con su boca, pero antes de lanzarla, algo le golpeó, llamando la atención del demonio, y olvidándose de Peibol. Cuando levantó la cabeza, vió como una muleta cayó justo entre el demonio y él, tras eso, escucho una voz detrás de él. "¡Aléjate de el! ", era la voz de Nora, que había venido hasta allí para intentar ayudar a Peibol.

PEIBOL:
¡VETE DE AQUÍ YA!

Era demasiado tarde, sin una muleta, no habría podido echar a correr, y ahora el demonio la tenía a ella como objetivo. El demonio saltó hacia ella, pero antes de tocarla, quedó congelado.

YUKI:
Justo a tiempo, te lo dije Peibol.

PEIBOL:
M-menos mal...

Pibol se desmayó después de la escena, y Yuki al acercarse, vio como aparte de las costillas, tenía la tibia clavada en el fémur, imposibilitando que pudiera andar.

NORA:
¿Quien eres?¿Puedes decirme que acaba de pasar?

YUKI:
Soy... Un amigo de Peibol, no te preocupes, no te haré daño.

NORA:
¿Que narices acaba de pasar? ¿Me lo puedes explicar?

YUKI:
Te lo explicaré luego, recoge tu muleta y ayudame a llevar a Peibol a un sitio seguro.

NORA:
Vale pero, ¿que eres? ¿Porque puedes congelar cosas con las manos?

YUKI:
Deja de preguntar tanto y ayudame ya.

Nora se dirigió cojeando como pudo hacia su muleta, y al cogerla, se dió cuenta de algo. Había un agujero en el hielo en el que estaba encerrado el demonio, y este no estaba. Cuando se dio la vuelta, estaba Yuki tirado en el suelo en un charco de sangre a unos metros del sitio de antes y al Demonio en frente suyo, observandola, con Peibol a los pies, inconsciente aún. Nora se quedó quieta esperando que el demonio no le viera, pero no pudo evitar empezar a temblar de miedo, provocando así que, el demonio diera un potente grito y echara a correr hacia ella. Antes de que la chica pudiera reaccionar, el demonio la dio un gancho en el hombro, reventandole completamente el brazo. Nora salió volando y chocó contra un árbol quemado, quedando sin fuerzas ni posibilidad de huir, así que solo cerró los ojos y aceptó su muerte. De repente, escucho un grito de dolor por parte del demonio, y al abrir los ojos, no pudo creer lo que veía, Peibol se había interpuesto entre Nora y el demonio, y no sólo eso, había cortado el brazo con el que iba a golpear a Nora, pero había algo extraño en él, su corazón no latía, de hecho, ni siquiera estaba vivo...

¿Que os ha parecido? ¿Muy gore? Espero que os haya gustado, nos vemos en el siguiente capitulo. "UN GRAN MISTERIO REVELADO"