¡BAMF Jiang Cheng!

Poner Tu Dinero En Donde Esta Tu Boca

Poner Tu Dinero En Donde Esta Tu Boca

Resumen: Un Inmortal Jiang Cheng se envía a si mismo accidentalmente en el tiempo y, cansado de la mierda de su familia, les grita sus verdades de forma muy melodramática, se hace pasar por muerto y en lugar de retirarse de todos los asuntos mundanos como buen inmortal, abre una tienda de té esperando tener una vida normal por una vez.

Lamentablemente sabe que el destino no está contento con esa idea cuando un herido Lan Xichen aparece medio muerto en su puerta.

Joder...

*

Poner su dinero donde está su boca es la forma familiar y simple de decir que es más fácil hablar sobre un problema que hacer algo al respecto, o que uno está muy comprometido en algo.

*

Cuando Jiang Cheng tomo su décimo tercer copa de alcohol (el más fuerte que pudo encontrar) maldijo su inmortalidad y resistencia absurdas. Eran buenas, en la mayoría de los casos, como cuando ascendió y, en su aburrimiento como uno de los dioses mayores, comenzó a frecuentar las cantinas y bares de plano divino (¿quién diría?) para los espíritus y dioses de menor importancia. Lo único que hizo que no perdiera la cara en esos lugares fue que su resistencia innata le dio oportunidad.

Pero en momentos como estos, queriendo olvidarse y ahogarse lamentando su jodida suerte en su maldita existencia, no le servían de nada.

Con un suspiro agotado se levantó de la barra y dejo una bolsa llena de oro, de las muchas que había ganado esa noche. Ajusto su capa y salió del establecimiento ignorando los gritos de sus oponentes y, más adelante, al grupo de personas de túnicas blancas con las que se cruzó.

¿Cómo termino en esta maldita situación? Incluso después de este corto tiempo (unos pocos meses) aún se lo preguntaba.

Se había despertado un día después de una torrencial tormenta, en su cuerpo más joven obligado a crecer en minutos y en el pasado.

¡En el puto pasado!

Joder.

Jiang Cheng había llegado a un acuerdo con su (mortal) vida antes de la ascensión. Para ese entonces ya habían pasado miles de años después de la muerte de Jin Lin, su obstinado sobrino que murió muchas décadas después que todos sus conocidos, que su propia esposa, solo para no dejar solo a Jiang Cheng, aunque ambos sabían que nunca alcanzaría la inmortalidad como su tío.

Pero Jiang Cheng lo había superado, había adoptado a (más de) tres desastrosos hijos (extraoficialmente) que lo ayudaron a sanar de poco en poco, que le enseñaron a ver su propio valor, que lo ayudaron a levantarse de todo ese auto deprecio que tenía para sí mismo. Le enseñaron a nunca soportar la mierda de nadie. Que él merecía mejor.

Sus hijos había fallecido hace tiempo, pero Jiang cheng siempre los mantendría en su corazón.

El punto era, al final había llegado a un acuerdo con su (inmortal) vida: Había aprendido a vivir y disfrutar cada instante, en lugar de lamentarse (aunque a veces no podía evitar esos momentos de melancolía y recuerdos). Había hecho amigos (inmortales) y (mortales) que aunque lloraría, no los dejaría ahogarlo en soledad.

Y todo se fue por el caño al encontrarse en el maldito pasado.

Primero pensó ¿Tal vez es una oportunidad? ¿Tal vez pueda repararlo todo?

...

¡Joder, No!

Había aprendido a dejar el dolor atrás, pero eso no significaba que lo olvidaría fácilmente.