Past Life ❀ SeBaek

⁰⁰ ᴀᴠᴀʀɪᴄᴇ

♘ Aclaración: la vida pasada no es narrada de forma continua, es decir, pueden haber lapsos de tiempo largos o cortos entre cada fragmento, como horas, días, hasta meses posteriores al anterior sueño. Esto se debe a que son recuerdos que van apareciendo por partes y no en su versión completa, ya que se trata de la vida pasada en el cual se han perdido la mayoría de recuerdos.

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Gotas de sudor se deslizaban por su frente mientras Sehun dormía, la expresión de su rostro indicaba que quería despertar, que no quería seguir atrapado en esa pesadilla que minutos antes era como un sueño, ¿Por qué no podía abrir los ojos? ¿Por qué era tan difícil despertar? ¿Por qué se seguía reflejando lo mismo en sus sueños?

Sus ojos se abrieron de un solo impacto, su respiración se encontraba muy agitada, mientras que todo su cuerpo sentía un profundo calor, como si estuviera encerrado cuando no era así.

−Otra vez tengo el mismo sueño, con la misa temática de la dinastía Goryeo. −deslizó su suave mano que se encontraba sudada por todo su cabello para que éste no estorbase en su rostro. −Tal vez sea por el examen de historia que tengo pronto, me volveré loco si sigo de esta manera. −se acomodó nuevamente en su cama, en la cual podía observar el techo. −¿Pero por qué siempre veo el rostro de una persona en particular? A los demás los veo distorsionados, por más que lo intente es inútil poder identificarlos. −se giró hacia su lado izquierdo buscando reconciliar el sueño.

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−¡Deben hacer lo que yo digo, cuando yo lo digo! −demandó el príncipe Oh Sehun, mostrando una seguridad inmensa de sí mismo.

Todos temblaban al estar enfrente él, sólo su aura hacía sentir incomodidad y temor. Nadie hablaba para contradecirle o interrumpirle, no podían expresar una opinión diferente a la suya o verían lo que es el infierno estando en la tierra.

Salió de la habitación donde se encontraban, acabando así la reunión que él mismo había comenzado. No dejó que nadie hablara, sólo ordenó y dejó claro que si volvían a cometer un mínimo error, serían castigados.

El príncipe se encontraba caminando por el reino, tomando un poco de aire para calmarse. Sabía que su forma de ser no era la mejor, pero es como él sentía que debía ser para hacerse respetar, para no ser traicionado fácilmente y para poder ser el futuro rey se la dinastía Goryeo.

El momento de tranquilidad no duró mucho, un súbdito llegó hacia donde Sehun se encontraba. Manteniendo la distancia correcta le informó que su padre, el rey YiXing quería hablar con él, cuando terminó de dar el comunicado se retiró del lugar.

El príncipe sabía que el tema que su padre quería tratar era sobre su carácter, varias veces le ha dicho que debe corregirlo, pero se le hace muy difícil, no le gusta sentirse inferior y menos recibir órdenes.

Los pasos resonaban por las paredes del pasillo, Sehun era la única persona que se encontraba caminando por ahí, claramente nadie quería acompañarlo. Abrió la puerta de la habitación, al alzar su mirada vio a su padre sentado en el trono que él codiciaba con todas sus fuerzas y que algún día tendría a su poder.

−Recibí un comunicado de que quería hablar conmigo, su majestad. −realizó una pequeña reverencia, luego procedió a arrodillarse para prestar atención.

No le gustaba mostrarse de tal manera frente a su padre, lo hacía sentir menos, como si no tuviera poder alguno.

−Esta vez no es sobre tu conducta, aunque ya sabes lo que opino de ella. −su expresión era vacía, si mirabas con atención no podías sentir nada, era como si su alma estuviera muerta. −Pronto te casarás, mañana mismo vas a conocer a tu mujer. −informó con autoridad, dejando en claro que no podía desobedecer.