UN GRITO SILENCIOSO

CAPITULO 2

Alice quedó estupefacta durante al charlar hacia aquel chico de sus sueños, simplemente le encantaba sentir esa sensación, pero trató de calmarse para disimular en una escuela llena de las atrocidades, dejándote en cuenta de que esta escuela no es segura.

Alice entró a sus clases y comenzó en sus días de aburrimiento, donde les comía horas y horas para distraerse con una tarea que hacer pues, es su obligación hacerla y estar atenta a lo que dice el maestro.

Eso fue que el tiempo volaba cuando tú hacías las tareas y no cuando prestas atención al maestro.

El timbre sonó a los cuatro vientos, a lo cual hizo cambiarlos de maestros, para dejar que el tiempo sea un poco más aburrido que de costumbre.

Y así pasaba el tiempo, te cuidabas de que ya no vean ridiculez en ti, que no vean que eres un completo estorbo.

En el mundo de la cárcel tendrás que sobrevivir de los Bullys, acoso callejero, esquivar al grupo de plásticos, y que no seas un imán de los rumores.

Mientras tanto, la joven de cabellos negros esperaba hasta que la hora le dé al timbre su descanso.

Y cuando el tiempo voló, las campanas sonaron, y desde eso, los alumnos se alteraron en salir, mientras que Alice ponía sus brazos que cubrían su pecho y rostro mientras se protegía de los golpes que iban sucediendo en la multitud.

La gente le parecía raro, pero para Alice, es muy útil para evitar que te golpeen en tus partes débiles.

Mientras entraban como locos a la cafetería pudieron sentarse corriendo, donde se separarían e irían en sus grupos, solo Alice se quedaría sola.

Cuando de repente. . .

Su mejor amiga Ane, la había asustado soltando un ¡Boo! Para hacerla saltar y simplemente sonreír.

Alice le había dado un golpe ligero en su hombro.

━ ¿Cómo te atreves a hacer eso? Te juro que no me había dado cuenta -. Dice la pelinegra soltando un suspiro mientras se agarraba el pecho dramáticamente

━ Pues veo que estás triste y como es mi deber hacerte feliz ¡Te hago cosquillas! -. Sonriente la chica de cabellos castaños, te toca el estómago para hacerte sentir como un payasa

━ ¡Ja ja ja! Basta, basta -. Decías mientras tratabas de quitarle las manos de su estómago pues, te daba cierta cosa.

━ Vale. . . Te dejo unos minutos que descanses -. Exclamo para dejarte un rato-.━ Pero no te dejaré triste, nunca en mi amistad.

Te hizo soltar unas cuantas risas, Alice simplemente acaricio los cabellos sedosos de su compañera y mejor amiga de su vida.

Mientras tanto, se acercaba a su momento de comer, donde la comida se posaría en la bandeja y caminar a sus asientos donde comerá.

Aquella joven se acercaba pronto y se sentaba a su lado, Ane tenía su bandeja con la comida y poder disfrutarla con su amiga, además de que cuenten rumores.

Cosa de chicas. . .

━ Oye Alice, te quiero decir algo

━ ¿Qué pasa Ane?

━ ¿Es cierto que Austin tendrá planeado una fiesta?

Alice se encogió de hombros sin importarle el tema fiesta.

━ No sé Ane, de seguro que no, estamos en temporadas de exámenes y tenemos mucho tiempo en qué estudiar.

━ Si pero, conociendo a Austin. . . Podría ser capaz de hacerlo. . .

━ ¿Por qué lo dices?

━ Quizá es por su cumpleaños ¿no crees?

━ Me lo imagino. . .

━ Alice. . . Te sigue molestando la Sra. Parson

━ Tsk. . . No quiero hablar de ese tema

━ Pero es malo enojar-. . .

━ ¡DIJE QUE NO! -. Alzo la voz Alice demostrando cuyo poder de la dominancia no se la quitan nadie, ni el diablo lo puede arrebatar de ese momento.

Todos se quedaron callados cuando miraron a Alice, un silencio profundo de hizo entre Alice y Ane.

La pobre no podía moverse por la intimidación que tenía, como un depredador oliendo a su presa.

Su voz de Alice resonó en un tono oscuro y frío de su parte.

━ No quiero hablar de eso ¿entendiste? -. Su mirada fija era la herencia de su familia, nadie la miraba de esa misma forma, pues eran como dos agujas penetrando hacia aquellos ojos de Ane

Ane asintió muchas veces por el miedo que sentía cuando Alice estaba enojada con ella.

Cuando de repente una voz lo hizo llamar la atención.

¿¡QUÉ OCURRE AQUÍ?!