Dos bandos enfrentados: por un lado Juntos por el Cambio, por el otro Frente de Todos. Los líderes de ambos partidos se enfrentarán por estar en el primer lugar, sin embargo, también deberán enfrentarse a sus sentimientos...
Han pasado tres días desde aquel interesante momento, no puedo sacármelo de la cabeza.
He estado haciendo campaña por todo el país últimamente, y tengo que nombrarlo constantemente para recordarles al pueblo que Mauricio Macri no es una opción. Aunque para mí si lo es, y no estoy hablando de gobiernos.
Pensé-"¿Qué importa lo que siento? ¿Acaso no veo que pongo en juego mi futuro y el futuro de nuestra nación?"-
Claramente entré en una crisis.
-"No puedo permitirme que ese hombre altere mis planes, aunque pareciera que ya lo hizo... ¡No! No lo hizo, debo mantenerme en el camino y luchar contra lo que siento"- me dije.
Pero simplemente no puedo dejar de pensar en esos ojos claros, color del bello cielo, que me vuelven loco. Me lo imagino mirándome tiernamente con esos ojos mientras recorre y juega con su lengua sobre mi miembro totalmente erecto. Imaginármelo me hace temblar.
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Claro que esto jamás sucederá ni saldrá a la luz lo que siento, mucho menos ahora que me comprometí políticamente con Cristina. Me mataría si se enterase. El "mataría" puede significar solo una expresión, pero también una literalidad. No quiero averiguarlo..
Solo debo mantener todo lo que sea sensaciones, deseos e intenciones a un lado y dejar que florezca aún más mi lado coherente, calculador y, sobre todo, racional.