la bella y la bestia

Capitulo 5

Nada mas y nada menos, el chico que acaba de llegar, es el mismo de ayer en el restorán

El que me dijo que era supuestamente suya ¡JA!

Pero de la nada me llega ese mismo sentimiento de que lo avía visto antes, ademas de ayer

Salgo de mis pensamientos debido a que una gruesa y grave voz hable sin emoción alguna, de no ser por el enojo

-¿Quien le hizo eso?

-Fui yo, alfa- dice el malhumorado del guardia pero lo dice orgulloso de haberlo echo

En un abrir y serrar de ojos el chico guapo tenía al guardia agarrado del cuello contra la pared, dejando que sus pies ya no toquen el suelo

-¡¿Como te atreves a pegarle a tu futura luna de esa manera?!- grita este y todos los presentes se sorprenden gracias a su comentario

Pero el guardia no alcanza a responder debido a que, el que se supone que es el alfa, le entierra unas largas y afiladas garras en su estómago. Le empieza a salir mucha sangre cuando el alfa retira sus garras, y mientras a mi me dan unas arcadas porque no soporto ver sangre

Levanto la mirada y el alfa está a solo un par de centímetros a distancia de mi

-Mía- me susurra al oído y luego mete su nariz en mi cuello y aspira con gran profundidad cosa que hace que se me pongan los pelos de punta. De un minuto a otro para de olfatearme y se aleja con algo de asco

-Lleven a esta a su habitación. Y a los otros los quiero en mi oficina en quince minutos

Este tipo sí que es bipolar, un segundo dice que soy suya y el otro me trata cómo está

Por mas que allá querido alegarle no tenia las fuerzas para decir algo o moverme. Quede impresionada por lo del guardia, mis piernas no pueden más, de repente todo se ve vuelve negro y caigo al suelo perdiendo la conciencia

(...)

Despierto en una habitación grande y preciosa, acostada en una cama enorme comparada con la que tengo en mi departamento.

Me levanto de la cama lo más rápido posible y me pongo a observar la habitación

Avía un velador con una lámpara, un espejo de cuerpo entero donde se guardaban los accesorios, un escritorio con lápices, carpetas, libros y cuadernos encima y una silla, un sillón cama, una terraza que tenía una mesa y dos sillas.

Luego avía un mini pasillo donde avían dos puertas, y entremedio de las puertas avía una mini biblioteca, pero sin libros

En una de las puertas avía un baño inmenso con jacuzzi, una tina y todo lo que tiene un baño

En la otra puerta avía un armario enorme, pero estaba vacío. Con toda la ropa que tengo no se llenaría ni la mitad de esto

Salgo del armario y salgo al balcón para ver qué tan alto estoy. Me asomo por la baranda y me doy cuenta que estoy en el tercer piso

Me dirijo a la última y más grande puerta, intento abrirla pero está serrada con llave

Me rindo y me dirijo a la cama a recostarme un rato pero de repente la puerta se abre y una chica con pelo café y rosado aparece