El Poder De Tu Mirada

Capitulo 4

"Esta viva", las palabras de kikyo resonaron en la cabeza del hanyou

-¿Como lo sabes?, ¿por qué estás tan segura?

- porque sus almas no han llegado a mi, si ella hubiera fallecido ya habría recibido todas las almas que me pertenecen.

- Pero kikyo, esas almas realmente no te pertenecen- le dice inuyasha seriamente

- Son mías!!!, ella es una simple copia, esas almas me pertenecen!!- dice kikyo furiosa

- Kikyo, tu falleciste, si estás aquí es por la magia de esa bruja, sin embargo no estás viva por completo, tarde en darme cuenta pero ahora lo sé, discúlpame kikyo pero no puedo cumplir la promesa que te hice, jamás dañare a Aome por ti- le dice inuyasha seguro de sus palabras

-¿Acaso nunca me has amado?- le cuestiona kikyo intentando convencerlo y hacerlo sentir mal

- Te equivocas, te amé y mucho, sin embargo esa mujer que ame realmente falleció hace 50 años, prometí protegerte y fallé, Naraku te engañó y tu no confiaste en mi, el ocasionó que tu herida fatal y tu decidiste sellarme en ese árbol, no es reclamo te lo aseguro, pero ahora puedo ser sincero con mi corazón, ya no siento más amor por ti, mi corazón es de ella, de mi Aome.

-¡¡ Es imposible!!, me lo debes inuyasha!!! Fue tu culpa que yo falleciera, pero esa desgraciada me las pagará, recuperare lo que es mío, tanto mis almas como tu corazón eso te lo juro!!!!- grito kikyo furiosa y del mismo modo desapareció del bosque.

Inuyasha se quedó en el bosque razonando lo que había pasado, el amaba a Aome y apenas ahora lo había descubierto, solo esperaba que no fuera demasiado tarde para que ella lo perdonara, ahora que sabia que estaba viva, nada lo detendría hasta encontrarla y poder declararle su amor...

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La nieve comenzaba a hacerse más densa y Aome aún estaba débil para viajar, el clima estaba empeorando y pondría en peligro la salud de Rin, estos contratiempos tenían al Lord Sesshoumaru más serio de lo normal, ¿que haría?

- Amo bonito? Creo si seguimos en esta cueva la niña Rin podría enfermar, este clima no es seguro para ella

-Lo sé Jaken- responde molesto el youkai

Aome escuchaba todo desde donde estaba recostada, ella sabía que los inviernos en el sengoku son peligrosos debido a las tormentas, se sentía culpable de detener al grupo por su salud así que intento ponerse de pie, con mucho esfuerzo mantuvo el equilibrio y con una gran sonrisa se dirige a los dos yokais que hablaban

- Sesshoumaru, ya me encuentro mejor, no se preocupen por mi, yo me iré a casa de la anciana Kaede, ustedes vuelvan con Rin, su seguridad es primero.

El Lord no creía las palabras de la Miko, su olfato le decía que aún no estaba del todo bien, observó como se Mareó un poco y tuvo que volver a sentarse en las pieles, no, no estaba del todo bien

- Jaken, tu y Rin adelantense, vayan al castillo y preparen una habitación para la Miko, nosotros los seguiremos en cuanto ella pueda viajar.

-Pero Amo!! Yo no me quiero ir!!!- dice la pequeña poniendo ojitos tristes

- Rin, obedece!- ordena el youkai

- Pequeña, hazme un favor- dice Aome consolando a la niña quien ya comenzaba a derramar lagrimas- que te parece si vas con Jaken al castillo y eliges una habitación para mi, la preparas para cuando el señor Sesshoumaru y yo los alcancemos, aún no puedo viajar, pero tu puedes preparar todo para mi llegada, ¿te parece??-

Los ojitos de Rin mostraron cierto brillo- ¿entonces usted vendrá al castillo con Rin?

-Si no hay algún problema?- voltean a ver la reacción del lord

El asiente la cabeza en señal de aprobación

-Siiii!!! Entonces vamos señor Jaken porque voy a elegir la habitación más hermosa para mi mami!!!- de pronto se para en seco y voltea a ver a los dos adultos

- Pero, la habitación más hermosa es la suya Amo, me permite arreglarla para mi mami???

El rostro de Aome se vuelve rojo como un tomate al imaginarse en la misma habitación que el, así que sin dudarlo le dice a la pequeña

-No te preocupes pequeña puede ser la segunda mejor- sonriendo tímidamente

-Esta bien, Jaken vámonos!! Hay que correr para llegar temprano

- Esta muy lejos su castillo?- pregunta Aome al youkai temiendo por la seguridad de la niña

- Un poco, una semana a pie, sin embargo la velocidad de Ah-Hun es buena y llegarán al atardecer de hoy si no se detienen más tiempo.- contesta orgulloso el Lord del Oeste

- Entonces es hora de despedirse por ahora pequeña- le dice Aome a Rin dándole un fuerte abrazo

-Señor Sesshoumaru, cuide mucho a mi mami, para que pronto nos acompañe a casa- le dice Rin al Youkai mientras la subía en brazos para montarla en el dragón

- No te preocupes, estará bien- responde secamente Sesshoumaru- Jaken, cuidala mucho, esta por demás decirte que si le pasa algo puedes considerarte despedazado verdad?-

-Si amo bonito, no se preocupe por ella, llegaremos bien- le contesta el sapo muy nervioso

Y asi fue como durante las primeras horas de esa mañana helada salían de su refugio Rin y Jaken para dirigirse al castillo del Oeste dejando a una Miko aún débil y su guardián Lord Sesshoumaru con la encomienda de cuidarla.

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El clima no brindaba ayuda a los amigos de Aome, en varias ocasiones intentaron salir a buscarla después de que Inuyasha les había dicho que estaba viva, sin embargo tenían que regresar porque poco a poco la nieve hacía imposible viajar. Tenían que esperar que el tiempo mejorara un poco ya que se avecinaba una gran tormenta invernal.

Su frustración era mucha, cada semana que pasaba era más difícil dar con ella, su vida peligraba más, además no sabían en qué estado la encontrarían, sabían que aún estaba con vida ya que kikyo no había vuelto a ser humana, así que la esperanza existía, solo esperaban que estuviera bien.
Inuyasha no dejaba de culparse por esta situación, el deseaba que al encontrarla pudiera perdonarlo por haberle fallado.

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Aquí otro capítulo más.....
Agradezco sus lecturas y si les va gustando agradecere también sus votos y comentarios

Saludos 🤗🤗🤗🤗