Todo daba vueltas, no veía con claridad y lo único que quería era salir de allí.
Las fuertes extremidades que colgaban en su espalda no lo dejaban desplazarse libremente, sentía peso en sus pies y fuertes ganas de llorar. Trató de abrir sus ojos nuevamente para reconocer en dónde se hallaba y porqué estaba tan agotado, pero no lo logró.
Escuchó a alguien o algo entrar pero no le dio importancia, quiso levantarse, consiguiendo así desplomarse en el suelo, húmedo y frío.
—Bienvenido a la realidad, Jesús.
—¿Quién es?— Ya no pretendía abrir los ojos porque de ellos caían lagrimas repletas de sangre y sudor.
—Tu padre— Sus pasos se acercaban a él, imponentes.
—¿Por qué me siento fatal?
—Se llama nacimiento, es normal que llores y que no quieras estar aquí.
—No puedo ver con claridad, siquiera levantar mis parpados, me arden.
—Dentro de un par de horas esos malestares se irán. Lo importante ahora es que estés informado acerca de lo que te voy a platicar.
—De acuerdo.
Su padre se sentó en una banqueta que se encontraba en la habitación, nunca se arrodillaría ante nadie. Menos ante su nuevo hijo.
Jesús se reincorporó apoyándose en la pared de tonos negros, con la mirada fija en sus manos.
—Hace aproximadamente cinco horas has nacido, recién te has despertado porque así es el proceso. Supongo que ya sabrás el desarrollo del parto, ¿No? Si no lo sabes después averígualo, yo no hablo de esos temas. El punto principal es que has venido por una razón, podría llegar a considerarse «celestial».
«a lo que me refiero es que tu serás el rey algún día, el rey de los ángeles. Dominarás todos estos terrenos llenos de almas en pena y desgracias. Pero nadie debe saberlo. Por lo menos por el momento.
«ya he notificado a dos de tus hermanos tu existencia, pero eres un gran milagro, por ello solo determinadas personas sabemos de ti».
—¿Por qué soy un milagro?
—Básicamente porque naciste de una humana. Es contra la naturaleza que un ser supremo como yo, que soy un ángel, esté con seres tan simples como los humanos.
—¿Mi madre es humana?
—¿Qué estoy diciendo?
—Entonces no te dirigas a ella como un ser simple— Jesús se levantó de golpe, ya su vista se había agudizado y sentía resistencia en sus piernas largas.
—¡Tú no me darás ordenes a mi!— Se enderezó y lo miró con furia.
—¿Para qué me quieres si tan poco valgo para ti?
Su padre comenzó a caminar en círculos, rodeándolo. Lo hacía mientras pensaba en cómo manipular a aquel ser que poco yacía en este mundo.
—No vales poco, pero sabes mucho. Necesito que me consigas las tierras del infierno.
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Mʏ Lᴜᴄɪғᴇʀ ɪs ʟᴏɴᴇʟʏ.
FantasyDonde Lucifer es el ángel más hermoso de todos y el más poderoso. Tendrá que enfrentarse a una guerra tan esperada tanto por los mortales como ángeles. De aquí nacerán los llamados demonios, todo saldría como debería salir pero algo, o alguien, logr...