❛ ҂ 𝗛𝗢𝗠𝗘𝗖𝗢𝗠𝗜𝗡𝗚 . . .
── it chapter two fanfiction
🎈 En donde el Club de los Perdedores regresa a Derry, encontrándose con sus amigos de la infancia y con un misterio que años atrás habían dejado abierto. ❞
𝐑𝐈𝐂𝐇𝐈𝐄 𝐓𝐎𝐙𝐈𝐄𝐑 | I...
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DE VUELTA A LOS VIEJOS TIEMPOS
— ¿Estás segura de que no quieres que te acompañe?— me preguntó Richie por 3era vez, eramos los únicos que quedabamos del grupo y no quería dejarme sola, pero no dejaría que me acompañara ya que tenía muy en claro que tenía que afrentar todo esto de una vez por todas.
— Sí, sí y sí, voy a estar bien, al anochecer nos veremos en la biblioteca, no te preocupes.— acaricié su mejilla y le di un corto beso en ella, el sonrió y yo también.
— Adiós, tonto.
— Adiós, tonta.
La chaqueta verde, por su puesto, esa chaqueta la use en toda mi adolescencia, era mi favorita ya que era un regalo que me había dado mi madre, el problema era que no sabía donde se encontraba, no puedo recordar nada y no tenía esperanzas de conseguirla, intenté recordar pero nada me llegaba a la mente, decidí caminar hacia mi antigua casa, luego de unos quizás veinte minutos logré encontrarla, y sin dudar alguna lucía igual, miles de recuerdo pasaron como viento por mi cara al verla, en ella crecí y eso siempre lo voy a recordar.
Crucé la calle hasta quedar frente a frente a la entrada de la que solía ser mi casa, la analice detalladamente, fruncí el ceño al ver que en la placa de identificación decía Los Morgan, ¿nadie había habitado esta casa en 27 años? eso era extraño, me decidí por tocar el timbre durante unos segundos, sin embargo nadie abrió ni dieron indicios de que alguien habitaba en aquel lugar.
Luego de unos segundos de pensar, decidí entrar, empujé la puerta lentamente logrando que un chirrido se escuchará y me diera escalofríos en toda la espalda, bien, vamos bien. Antes de seguir indagando, me sugerí a mi misma darme un largo bocado de aire, la casa seguía igual después de tantos años, parecía que habían pasado meses, lo cual me extraño, no habían hórmigas, polvo o insectos, todo parecía en orden.
— ¿Keith? ¿cariño?— mi sangre se heló en el momento que escuché aquella voz que conocía muy bien, era mi madre.
— ¡¿Mamá?!— subí las escaleras apresuradamente logrando que el molestoso chirrido se escuchará por toda la casa, sin embargo no me importo y intenté localizar a mi madre.—¡Mamá! ¿Dónde estás?—observé desesperadas las habitaciones, pero todas estaban vacías.
Entre a la que solía ser mi antigua habitación y una ola de recuerdos me inundó, sin embargo ignoré aquello y seguí buscando a mi madre, me di la vuelta dispuesta a salir de la habitación cuando mi corazón era el que se iba a salir.
— Keith...— su voz sonaba apagada y sosa, me dieron ganas de abrazarla pero de inmediato me di cuenta de algo andaba mal.—Keith, mi niña...estás aquí...
