Hermione Jean Granger y Harry James Potter

Capitulo Vll

Narrador.
Después de aquel beso tan infraganti ambos quedaron sonrojados, y en un silencio ensordecedor, en el cual el silencio era incómodo, o más bien intenso, ninguno de los dos se movían, Hermiome tenía un nerviosismo al cien, se paro con arte de magia y le dijo a Harry que se le había olvidado estudiar para el examen de pergaminos, demonios era la escusa más patética de la historia aún así salió caminando rápidamente, dirijiendose a la torre Gryffindor, mientras Harry se quedó pasmado por la acción de su amiga, o sería su amante, esto si que era complicado.

Harry comenzó a dar una vuelta por el jardín para distraer su mente hasta que irrumpieron su paz, cierta pelirroja chocante.

-Harry cariño, ¿donde te habías metido estos días?

-Haaaaaa Giny te lo he repetido cientos de veces, no me digas cariño, es incómodo y se puede malinterpretar, lo sabes perfectamente, tu y yo no tenemos nada que ver.

-Enserio ¿Por qué te comportas así conmigo, creí que estábamos bien?

-¿Bien? Tu sabes lo que hiciste Ginebra así que no me vengas con estupideces ahora, no eres mas que una traidora.

-¿De qué estás hablando Harry traidora? (nerviosa)

-Ja todavía con el descaro que te lo recuerde, primero traicionaste nuestra amistad, luego nuestra relación, y al final traiciona  tu poca dignidad que te queda parandote frente a mí. Ahora si largo

Giny comenzó a llorar y temblar, apretó los puños y se hecho a correr hacia su habitación.

Harry tomó aire pesado, por aquel descaro de la que un día considero su propia vida. Alguien con quién formar una familia, pero nunca se imagino que lo engañar con Deán era algo que nunca le perdonaría.

Antes de llegar a su habitación Giny se encontró con Hermione.

-Todo es tu culpa maldita perra, si no estuvieras aquí Harry se fijaría solo en mi.

-Ginebra es mejor que te calmes, si no te das cuenta no es el lugar apropiado para tus desplantes emocionales.

Miró al rededor y vio cómo todas la esban viendo así que decidió dirigirse a su alcoba
- Maldita sangre sucia

Narrador.
Los días pasaron y fue algo complicado evitaban sus miradas e intentaban que pareciera todo normal pero se morían por dentro.

Harry  tenía que ir en contra de sus impulsos pues tenía miedo de poner en peligro a su amada, ya que muchos todavía estaban en su contra, buscaban su infelicidad, como si el propio Voldemort siguiera ahí, pero aún así no podía dejar de desearla con la mirada, la recorría por completo de forma indecente en su mente, jamás había deseado tocar más algo que a ella, nunca fue caprichoso pero parecía un niño que deseaba un caramelo con tanta fuerza que hacía berrinches y lloraba en instantes del dolor que le provocaba no poder acariciarla, darle un beso, tomarla de la mano, provocar su sincera sonrisa, solo quería amarla con locura sin temor, con su sincero corazón.

Hermione pensaba en la discucion de Giny acaso había algo de malo ser feliz, haaaaa ella tuvo la oportunidad de tener al hombre ideal pero lo destruyó, no fue Hermione sino ella misma, así que no tenía que sentir lástima de ella. Sin duda haría a Harry feliz.