Lo recuerdo con gran vivídez, el día en el que la conocí; En ese entonces ella no podia verme, era una situación mágica e inusual, me atrevería a decir que incluso aterradora, estaba tumbada sobre la fria roca gris, apacible, su cuerpo descansaba con gran pesadez, tanta que el unico indicio de que estaba viva era su respiracion profunda y continúa.
Cuando despertó estaba aterrada, no recordaba su nombre ni como había llegado allí, miro a su alrededor, no habia rastros de vida al menos a un kilómetro a la redonda, aquel lugar estaba nublado y vacío, el suelo gris y rocoso se extendia por debajo de sus rodillas y parecia estar completamente sola.
Desconcertada trató de recordar sin éxito, estaba asustada y en un lugar extraño.
Un pesado sentimiento de impotencia la inundó y las lagrimas brotaron de sus ojos, no recordaba nada pero parecia extrañarlo todo.
Trató de recordar algun indicio de quién era, talvez una família, quizá amigos o conocidos, sin embargo fueron solo rostros borrosos los que brotaban en su mente, dehecho, no sabía siquiera como ella lucía.
No tenía una identidad propia, nisiquiera podia recordar su nombre, era como un lienzo en blanco ;Ante tal sentimiento de frustración no pudo contener el llanto y en cuestion de segundos estaba llorando amargamente
-¿Dónde estoy?-murmuró entre dientes sin esperar una respuesta pero, para su sorpresa escuchó algo...
-Alice - dijo una voz sin dueño
-¡¿hay alguien aquí?!-gritó con un aire de esperanza
-¡Alice!-volvió a escuchar con más intensidad,de forma inmediata decidió levantarse de aquel áspero suelo y comenzó a caminar sin saber a donde dirigirse, caminó unos 10 pasos sin rumbo alguno hasta que escuchó ese nombre nuevamente; sin razon aparente sus piernas comenzaron a temblar, la niña tenía la intencion de seguir aquella voz, cosa que le fue extremadamente difícil, depronto sus piernas pesaban como si hubiera rocas atadas a ellas, quería continuar caminando pero cada paso parecía eterno e insoportable, pronto comenzó a desesperarse,la voz parecía alejarse y esta era quizá su única esperanza de volver a casa, si es que tenía una, ella quería correr pero le resultó inútil, mientras más corría, el peso de sus piernas se multiplicaba, ya no podía más, la desesperación pronto llegó a la escena y explotó , los llantos amargos no parecían ceder por más de una hora después y fue así como regresó al suelo.
Ahí estaba, sola, al borde del colapso, sin identidad; Yo podía verla, pero ella a mi no, su belleza era única, casí etérea,era sorprendente como podía serlo incluso en ese estado, era un cuadro triste y hasta trágico.
La dejé llorar un buen rato antes de manifestarme, quería saber porque lloraba si le habia arrebatado todos sus recuerdos, no comprendía porque queria recordar lo que hace poco estaba tan decidida a perder
La contemplé un par de horas pero no encontré una respuesta,ella se resignó a quedarse en el suelo; Había ya dejado de llorar y sólo se quedó estática con una lagrima sobre su mejilla.
Ya era pasado del medio día y ella solo estaba en silencio sentada, removí la pesadez de su cuerpo, y al parecer ella se percató de ello puesto que se levanto casí innediatamente
La voz apareció denuevo-¿Alice?- esta vez la joven hizo caso omiso a ella y solo se limito a explorar el lugar, parecía que estaba esperando algo, pronto se percató de que estaba usando solo un camisón delicado que aunque era muy lindo, se transparentaba ligeramente, entonces cubrió el bulto de sus senos con las manos pero dejó de hacerlo después de pensarlo un poco, cubrirse era innecesario pues era la única en aquel lugar.
ESTÁS LEYENDO
La dama de la luna
FantasiAlice despierta con amnesia, en ese extraño lugar no hay nada ni nadie mas que ella, o eso es lo que creía.