Capitulo 22

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TM: bueno, ya tienen sabanas limpias, bueno chicas descansen

Tu: igual, mamá, descansa

TM: igualmente niñas, nos vemos por la mañana, y no se desvelen

Tu: ¡mama!

TM: yo nada más digo, tu mañana tienes escuela y no quiero que llegues tarde

Tu: si, lo sé,

TM: bien, descanse

Al cerrar la puerta, como pequeña niña corrí hacia mi cama y me avente tal cual fuera un brin colín

Demi: eres peor que una niña de 5 años amor

Tu: lose, pero sé que aun así me amas – la bese

Demi: claro que sí, te amo, así y como seas – seguimos besándonos, hasta que ese beso, pasó a algo un poco más intenso, hasta que la pare - ¿Qué pasa?

Tu: no es nada es solo que debo vestirme, estoy algo incomoda así, y quisiera ponerme algo más cómoda

Demi: de acuerdo amor

Tu: gracias - así que entre mi ropa que había encontré una piyama algo viejita pero que un me quedaba, la tome y me empecé a desvestir hasta que Demi dijo

Demi: amo verte casi semi desnuda… - me había espantado pero la tenía muy cerca de mí, estaba de espaldas y aun así podía sentir su respiración muy cerca de cuello, mi piel se erizo al contacto de ella, sus manos pasaron por mi abdomen y después una en mi espalda, me beso el cuello y desabrocho mi sostén el cual deje caer al momento, tomo con las dos manos mis senos y los empezó a masajeas y jalar sentía como mis pezones empezaban a erizarse y de un momento a otro no me contuve más y di un gemido – oh Tn me encantas

Tu: Demi… debo… debo ponerme mi piyama

Demi: ¿Por qué? ¿Acaso no te gusta?

Tu: claro que sí, me encanta, es solo que quisiera estar cómoda

Demi: en verdad que no quieres esto – sus manos bajaron hacia mi sexo y sus dedos los metió dentro de mi ropa interior, hizo un pequeño movimiento que hizo que diera otro gemido pero diciendo su nombre, así que me gire para poder verla mejor, bese sus labios hasta que me llevo hacia la cama, me acostó suavemente y poco a poco empecé a quitarle cada prenda que me estorbaba para verla mejor y ella a mí, beso de nuevo mis labios y después mi cuello hasta que comenzó a lamerse los dedos y con ella empezó a masajear mi parte intima, no paraba de gemir, ella me volvía loca, siguió así hasta no aguante más y llegue al clímax, deje que mi respiración me equilibrara, mientras que ella aun me observaba

Tu: ¡no es justo!

Demi: ¿Por qué lo dices?

Tu: yo también quiero hacerte sentir así como tú lo haces conmigo

Demi: bueno si es lo que … - la interrumpir callándola con un beso, ahora iba mi turno y aria que ella lo disfrutara, así que empecé a masajear su parte intima, hasta que de ella se escuchó un bello gemido que hizo que se me escapara una pequeña risita, pero continúe, de un momento a otro mi lengua recorría la parte intima de ella, sus gemidos eran mi placer y sus jugos un paladar esquicito, aun sumergida entre sus piernas succionaba de una manera que ni yo misma me lo esperaba – ummm… TN – mordí muy ligeramente su clítoris y empezó a gemir aún más fuerte

Tu: mi vida, no es por nada, pero aun te recuerdo que estas en casa de mis padres

Demi: no importa, tú… tú sigue

Tu: de verdad ¿quieres que siga?

Demi: ¡sí!

Tu: a la orden – así que introduje 2 dedos en su sexo el cual metía y saca poco a poco hasta aumentar la velocidad

Demi: voy… voy a llegar, Tn ¡oh por favor! Continua – seguí moviendo mis dedos hasta que Demi me tomo de la espalda y me enterró sus uñas pero era para darme a entender que había llegado al fin, deje que su respiración se equilibrara y después de eso bese su frente

Tu: Te amo mi vida

Demi: y yo a ti, mi princesa

Y nos quedamos profundamente dormidas   

El favor de la soledad. (Demi Lovato & Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora