Besos, Celos y Tentáculos

Mi camisa favorita!

- Largo!! -le grito a mi madre al ver que aún esta plantada en su lugar.

El monstruo o pulpo o calamar o cosa esa procede a acariciar mi cuerpo con esos tentáculos tan viscosos y mocosos...
Y lo peor es que me estaba gustando!!

Que asco, como podía estar gustandome esto?!

Mi vista estaba borrosa, no sabia por que, pero parecía ser por un tipo de niebla... rosa(?

...
Rosa... y con escarcha.
Ooooookey...

Lo bizarro del momento (más bizarro de lo que ya era) me sacó lo suficiente del concepto como para notar cuando mi camisa es rasgada por la criatura...

Sacandome definitivamente la piedra.

La camisa no era ni cara, ni era alguna que se vendío en una gira.
Simplemente era la camisa de nuestra pandilla.

Que por qué la usaba si venía a celebrar la fiesta de mi hermanita?

Simple.

Por qué luego de esto pensaba ir a la parranda que se montaba por el inicio de las vacaciones de verano.
(El que no se tenga uno que romper el coco y saber que fecha es hoy, es mega genial! Seria un delito no celebrar.)

Ya estaba por abrir mi boca y mencionarle a esa cosa de que se iba a morir.

Pero a lo lejos se escucha una explosión rompe tímpanos.

Un segundo, sí rompe los tímpanos, tampoco puede estar tan lejos.

Miro en la dirección de donde creo que viene el mini terremoto y de donde vino el sonido...

'El puente!!!'
Pienso con terror.

- Ahora sí! -miro a donde creo que deberían estar los ojos de esa cosa. (Debería tener ojos, no?)- Me suelta en seguidita o verás como te corto cada uno de tus asquerosos tentáculos, los frito al frente tuyo y se lo doy de comer a las ratas!!

No sabía si me entendía o si podía escuchar o si reaccionaría.

Pero lo hizo.

La cosa, ahora morada, pareció temblar de miedo, antes de soltarme y retroceder de mi, con todo y tentáculos.

Me quedo atónita, mirándole como la idiota que soy sin entender una mierda.

Si me han dicho que doy miedo cuando estoy furiosa y de que tenía el tono de todo una madre con chancleta en mano...
Pero de verdad podía espantar hasta a una criatura del más asqueroso porno chino...?

Me doy a mi misma una cachetada y sacudo la cabeza.
No tenia tiempo para pensar en bobadas, ya que llego a escuchar una segunda explosión.

Mis piernas reaccionan primero que mi celebro, corriendo directamente a las llamas y el humo.

No sabía que pensaba hacer.
Pero el pensar que mis amigos estén atrapados en ese infierno me destrozaba más que el dolor de las piernas por el deporte tan duro e inacostumbrado.

La feria, por razones del destino, se celebraba cerca del puente bajo el que se encontraban las más diversas pandillas de adolecentes con ganas de tirar todo a la mierda.

Mi pandilla era del tipo de deportistas sin madre.
(O al menos eso dicen todas las abuelas al vernos en acción.)

Solo a disfrutar el día como la basura social que somos.
Emborracharse y simplemente pasarla bien con los cuates.
Una utopía, a que no?

Pero en cuanto me acercaba al lugar, notaba de que había muy poco de que reírse.

Literalmente me encontraba en el infierno.