POEMARIO I

Recuerdo

Recuerdo como el cariño solía salir de una fuente que parecía ser inagotable.
En como tus brazos venían a mí sin pedirlo y en como todo parecía ser maravilloso y espectacular.
Recuerdo.

Recuerdo como tus dedos encajaban perfectamente con los míos. En como tu mirada parecía pertenecer a este tonto corazón.
Pero nunca ha sido así. Parece no ser demasiado. Siempre es poco lo que puedo darte, es poco, soy poco.

Y un poco muero. Muero por dentro.
Un poco lloro, lloro y no me detengo, aunque sea solo un poco. De uno en uno, se hace mucho.
Por dentro me quiebro, exploto y no puedo parar. No puedo parar de pensar en como pudiste fingir hacerme sentir que tenía tu atención, cuando no era así.

Me lastimas, me lastimo. Me lastima sentir esto.
¡Qué lástima! Lástima esta situación y que lástima que lástima después de un rato suene a una palabra rara y peculiar.
Lástima. No soy.
Lástima, qué dolor...
Es triste pensar y es triste querer. Es triste que yo te quiera mucho y no lo puedes comprender.

Qué triste este extraño sentimiento.
Te extraño, no es nada raro.
Extrañar, pero está bien que no quieras regresar.

Raro, soy raro. No puedo dejar de pensar.
No puedo dejar de cuestionar. De bailar, bailar tristemente.
Tristemente, triste, siempre triste, siempre yo.
Siempre nada,
Absolutamente nada.