Epílogo

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Como todos los días ella se encontraba preparando la cena para su familia, sabía que quizás Naruto tendría algunas complicaciones por su trabajo, pero así se estuviera cayendo el cielo, él siempre procuraba pasar algún tiempo con su familia.

Hinata suspiro, quién pensaría que algún día sería la esposa del Hokage, la cual le había dado dos hijos maravillosos, el guapo Boruto y la hermosa Himawari.

Ella a veces recordaba cómo era aquella niña tímida que observaba de lejos a Naruto, queriendo caminar a su lado, sin importarle que en algún momento tuviera que ser su amante para lograrlo.

Flash back

Los rayos del sol hicieron que la chica se despertará. En definitiva, tendría que comprar unas cortinas para cuando volviera a tener una noche así de intensa con Naruto.

Hinata se miró en el espejo y por un momento pensó si para su amado rubio ella significaba algo más que sólo un deseo carnal, quizás él ya se habría enamorado perdidamente de ella o sería el hecho de que como Naruto y Sakura todavía no habían tenido relaciones sexuales, él buscaba consuelo con ella.

Un dolor en el pecho le abrumo por un instante, ella haría cualquier cosa por Naruto, pero aun así le dolía pensar que su amor no era correspondido, suspiro y siguió arreglándose para ir a la oficina.

***

Ya era media noche y Hinata seguía trabajando, hoy habían tenido un día muy ajetreado con tantos documentos para firmar y algunos pendientes en cuanto a las misiones inconclusas.

Naruto: ¡Muy bien Hinata! Por el día de hoy creo que ya es momento de retirarnos.

Hinata: Pero... todavía nos falta mucho Hokage-sama

Naruto (mirándole de manera extraña): Tú más que nadie sabes que no me gusta que me digas Hokage-sama y si tanto respeto me quieres tener pues es momento de irnos, el trabajo puede esperar mañana.

La oji perla sonrió ante el comentario y decidió hacerle caso al rubio.

Después de caminar hacia el apartamento de la chica, Hinata le ofreció a Naruto que se quedara a cenar.

Hinata: Naruto-kun ha.... Hay algo que quiero preguntarte.

Naruto (Voltea y mira a Hinata): ¿Qué ocurre Hinata?

Hinata: Se que apenas llevamos 3 meses saliendo a escondidas, pero yo quiero saber cuáles son los sentimientos de Naruto-kun por mi.

El rubio sintió sus mejillas arder, no espero una pregunta así. Mientras que Hinata al ver la reacción de Naruto comenzó a pensar lo peor.

Hinata: Naruto-kun (Dijo con los ojos lagrimosos) yo entiendo si tú sólo me quieres para tener sexo.

Él se acerco a ella la abrazo fuertemente, después beso su frente y quito con sus pulgares las lagrimas que derramo la joven.

Naruto: Hinata, yo no puedo decir que te amo, pero tampoco te estoy simplemente utilizando para satisfacer mis deseos. Tú me gustas Hinata y estar contigo es lo mejor que me ha pasado.

Hinata: Y si Sakura-san decide tener sexo contigo ¿Tú me dejarías?

Naruto: Nunca me había puesto a pensar en eso Hinata, pero no creo que Sakura-chan quisiera tener sexo conmigo y aunque eso pasará, si de algo estoy seguro es que no cambiaria por nada lo fabuloso que han sido estos 3 meses.

Ambos se dieron un tierno beso, el cual fue subiendo de nivel poco a poco.

Fin del flash back

Sus mejillas se sonrojaron cuando se escucho como ambos pequeños gritaron "papá"

Hinata: Naruto-kun que bueno que hoy pudieras venir a casa.

Naruto: Hina, tú sabes que por mi familia trato de hacer cualquier cosa.

Hinata le sonrió como siempre y en familia comenzaron a cenar, algunas anécdotas graciosas sobre la academia, decía Boruto, mientras que Himawari les mostraba a todos los dibujos que realizó ese día.

***

Los niños por fin se habían dormido, Hinata miró un instante a Naruto que se encontraba en el sillón.

Hinata: Naruto-kun hoy recordé el día en que te pregunté qué sentías tu por mí cuando apenas llevábamos poco tiempo juntos y me surgió una duda.

Naruto: (La miró) ¿Cuál es tu duda Hina?

Hinata: Tú... ¿Estás feliz de haber formado una familia conmigo?, yo sé que puede escucharse muy tonto, pero a veces recuerdo cuando te casaste con Sakura-san.

Naruto: Hina, yo soy feliz contigo y nuestros hijos, no necesito nada más, estoy seguro que las cosas tienen que pasar por algo. Quizás si yo no me hubiera casado con Sakura-chan ahorita no estaríamos juntos.

Hinata abrazo fuerte a Naruto y él de inmediato agarro las piernas de su esposa para cargarla mientras caminaban rumbo a la habitación.

Naruto: Sabes Hina, quiero estar contigo el resto de mi vida, tú eres lo que siempre soñé.

Hinata: Te amo Naruto-kun y yo también quiero estar contigo el resto de vida Naruto.

Naruto: Yo también te amo, porque eres mi mujer ideal, la mejor amiga, compañera que la vida me dio y sobre todo la amante que necesita en aquel momento de soledad.

Los dos se besaron frenéticamente hasta quedarse sin aliento, esperando tener una noche como aquellas en las que ambos descubrieron que ser amantes fue lo mejor que les pudo pasar en la vida.   

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¡Muchas gracias! A todas aquellas personas que dedicaron su tiempo en leer está historia, aunque dure 4 años en terminarla, esperó les gustará y que nos sigamos leyendonos (Nota: deje esté comentario porque aún así, agradezco a quienes leyeron en ese tiempo está corta novela)

La amanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora