Chapter Twenty One

248 31 1
                                    

dejé que Mina fuera a casa con mamá, no la seguiría, estaba muy débil pera eso, me senté en el piso del gimnasio. respiré hondo, necesitaba comida, mucha comida. aun me quedaba algo de una barra de chocolate en mi bolsillo, lo tomé y lo comí. propuse levantarme y caminar unos pasos. afuera del gimnasio, justo en frente, estaba la cafetería. entré y fui directo a donde estaba la señora.

— prepáreme un sándwich, el más grande que haya preparado en su vida — le ordené, al borde de desvanecer. esperé pacientemente hasta que estuvo listo, lo devoré en un segundo. de pronto ya me sentía mejor, mucho mejor, me sentía renovada, fuerte, y creo que no era solo por el gran sándwich que la señora me había preparado. mamá estaba con Mina.

corrí a casa, corrí y corrí, tenía de nuevo mis fuerzas así que debía aprovecharlo. cuando llegué a casa subí las escaleras de dos en dos. abrí la puerta y lo vi; mi madre tenía las manos en la cintura de mamá y ella tenía sus brazos alrededor de su cuello. y sus labios estaban unidos en un suave beso.

— oh — sentí como toda la energía terminaba de volver, ahora me sentía completa, totalmente completa.

— Yeojin, oh ¿que haces aquí? — preguntó mamá, sus mejillas estaban ruborizadas.

— pues, solo quería saber como estaban — dije y sonreí, ya estaba llorando de la felicidad.

— ¿estás bien Yeojin? — preguntó mi madre. sequé mis lágrimas.

— si, si es solo que... amo verlas juntas — no soporté y las abrasé — las quiero mucho a ambas — ellas rieron.

— y nosotras te queremos a vos — dijo mamá.

— eres una buena amiga — dijo Mina. me separé y las miré.

— pronto tendré que irme, pero quiero que sepan, que siempre estaré con ustedes, no importa lo que pasé — ellas se mostraron sorprendidas.

— ¿a dónde te irás? — preguntó mamá.

— iré a casa... el lugar de donde vengo, pero tranquilas, siempre las recordaré — las abracé de nuevo, esta vez me abrazaron más fuerte.

— nosotras también, Yeojin — permanecimos así por unos segundos. esta es mi familia, la familia que tanto deseé, una familia que en realidad no tengo. y aunque extrañe estos momentos, tal vez no pueda hacer nada.

— bien — dije separándome y limpiando mis lágrimas — y... supongo que irán al baile, juntas ¿no es cierto? — pregunté, mamá miró a mi madre con una sonrisa pero esta bajó la mirada.

— ¿que pasa? — preguntó tratando de verla a los ojos.

— Chae, no podemos ir al baile juntas — dijo. mamá frunció el ceño.

— ¿por que? — preguntó afligida.

— yo... yo soy candidata para reina del baile de invierno, y... Jennie es mi pareja, los candidatos debemos ir juntos, vos lo sabes Chae — explicó de manera suplicante. ella apretó los labios.

— por supuesto que lo sabía, solo pensaba que eras diferente — se cruzó de brazos. yo estampé mi mano contra mi frente — por enésima vez.

— lo siento — mamá mordió su labio.

— vete de aquí — mamá apuntó la puerta.

— Chae...

— ¡VETE! — gritó, mi madre bajó la cabeza y salió de la habitación, las lágrimas de mamá volvieron a salir. sus mejillas estaban rojas, igual que las bolsas bajo sus ojos, había estado llorando toda la semana y me partía el alma verla así.

— Yeojin...

— está bien — entendí que quería estar sola y salí de la habitación, la oí desplomarse desde afuera.

— ¡Mina! — corrí hasta abajo, ella estaba a punto de subirse al auto, cuando logré captar su atención ella se giró.

— Yeojin yo... — pero antes de que me diera una explicación, decidí darle una yo.

— debí saber que no cambiarías — ella me miró confundida — así serás siempre Mina, siempre guiándote por lo que los demás digan. amas a Chaeyoung pero piensas que todo el mundo te atacará si demuestras tus sentimientos, por eso escapas, prefieres ver como todo se desmorona al intentar arreglarlo, prefieres que el tiempo borré tus errores a intentar enmendarlos. y así será con todo a lo largo de tu vida Mina, cuando tengas una hija y tu matrimonio no funcione, porque simplemente para ti es más fácil enfocarte en los defectos de tu esposa, dejarás a esa niña de lado porque no quieres que te recuerde a tus fracasos y ella terminará decepcionándose de vos y te llamará; Mina, porque debido a tus miedos, jamás podrás ser una madre para ella. intenté ayudarte... pero he fracasado y es más devastador de lo que crees. y un simple lo siento, ya no solucionará nada, no si estás dispuesta a hacerlo valer, ¿estás dispuesta a cambiar? esta vez... para siempre.

mi madre apretó sus labios y me miró a los ojos.

— lo siento — fue lo único que dijo. suspiré.

— hazlo valer, Mina — ella asintió, miró la ventana de la habitación de mamá.

— lo haré.

LA HISTORIA DE MIS MADRES » ❛SCY&MMN❜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora