Ojos color sol // Kyojuro Rengoku // one shot

Capitulo 4

Naranjo, un color cálido.

"la luna sale a caminar siguiendo tus pupilas"

Era Taisho.

¿Por qué esa cosa esta aquí ahora?, porque cuando creí que todo estaría bien, aparece una luna superior.

Kyojuro corto su brazo cuando la luna número 3 intento atacar a Tanjiro, fue un corte increíble y perfilado, pero la regeneración del demonio es muy rápida

-¿Qué tal si te conviertes en demonio tú también?- es lo primero que escucho cuando llego al lado de Tanjiro

-de ningún modo- veo a Kyojuro y el olor que desprendía es de una ira incontrolable.

El demonio deja de prestar su atención en Rengoku, para mirarme directamente, desvaino mi espada y me coloco delante de Tanjiro, el demonio se ríe a carcajadas

-¡ustedes dos!- este nos apunta a la vez uno al otro- desprenden un espíritu de batalla increíble- termina apuntando hacia mí- pero tú- y este que mosca le pico- tu harías cualquier cosa por el- apunto a Kyojuro- ambos en conjunto alcanzarían el territorio de lo supremo, ¡no puedo esperar para verlos!

-¿qué mierda es lo que estás diciendo? – aprieto los dientes, ante la acusación del demonio. Avanzo hasta quedar de lado con Kyojuro

-pero, les diré porque no pueden alcanzar la superioridad- se ríe otra vez- porque son humanos, envejecerán y morirán ambos. Si son demonios no habrá nada que los pueda detener

-envejecer y morir es la belleza de la fugaz criatura llamado ser humano- le dice Kyojuro.

El frio inunda mis venas, el ya no desprende su calidez habitual y eso me asusta mucho más.

El demonio que se presentó como Akaza no dejaba de ver embobado a Kyojuro, pareciera que con cada palabra que este decía, más se convencía a si mismo que Kyojuro debía y tenía que ser un demonio.

-nosotros y tu tenemos diferentes valores morales- digo mientras desvaino mi espada, preparada para un ataque

-no importa qué clase de motivación tenga, no me convertiré en demonio- dice Kyojuro, el demonio nos analiza en un segundo.

-ya veo- dice el mismo- si no se convierten en demonios los matare- invoca su habilidad demoniaca y ambos saltamos a lo que podría ser nuestro fin.

En el aire solo pude rozarle un poco el cuello, este aparece y desaparece demasiado rápido, haciendo difícil mi alcance

-¡sus respiraciones son peculiarmente distinta, pero en complemento son muy fuertes!- dice este en el aire-

¿¡Cómo es que se toma el tiempo de reflexionar sobra nuestras respiraciones?! Este maldito cree estamos jugando y se ríe en nuestras caras.

-respiración de la lluvia, cuarta postura, ¡tromba!- salto hacia él y giro mientras la tromba lo alcanza, al retroceder mi tromba está completamente rodeada de fuego que se complementaba al girar, miro hacia atrás y Rengoku igual lo está viendo. Fue él.

Pero nada dura mucho, de la punta de la tromba sale el demonio ileso directo con un golpe hacia mí. Salto a su misma altura y en diagonal corto uno de sus brazos, ¡maldición se tapó el cuello con su maldito brazo! su expresión es de enfado y su brazo libre me da un puñetazo y me manda lejos.

La caída de lleno al suelo jamás llego, solo sentí como unos brazos me rodearon y apenas pude abrir los ojos lo primero que vi fue un jabalí

-¿estás bien?- me levante rápidamente- ¡eso fue increíble!- a lo lejos podía ver como Kyojuro pelea con Akaza

-maldición- tomo mi katana del suelo y corro de vuelta a donde están los dos, una vez donde ellos kyojuro me gritan dándome la espalda.

-¡no vengas!- seguía peleando-¡no quiero que vengas!-

-kyojuro...- digo mientras veo como el da todo por sobrevivir, gastamos casi toda nuestra energía en los vagones del tren, tengo que ayudarlo... ambos se detienen y Rengoku me sigue dando la espalda

-no te mueras Kyojuro- ¿Qué? La respiración de Rengoku es pesado, está débil, tengo que moverme, no puedo dejar que lo mate, no debo

-¡te olvidaste de alguien infeliz!- ¡no dejare que un demonio me quite una vez más lo que más amo en mi vida! Respiración de la lluvia, primera postura, ¡lluvia torrencial!

-¡(Tn__) no lo hagas!- escucho a Kyojuro, pero no puedo quedarme de brazos cruzados viendo como Akaza lo asesina. Perdóname Kyojuro.

Estando lo suficientemente cerca hago el corte en su estómago, haciendo que con la lluvia este pierda el sentido y precisión, cortando por segunda vez su cara.

Respiración de la lluvia, segunda postura ¡tormenta eléctrica!, mi espada con el único que rayo que puedo expulsar iba directo a su cuello, lo puedo oler, es su destino.

Ante el segundo en el que todo era gris por la nube espesa, donde yo sabía que nadie más que yo y Akaza podíamos ver.

-un poco tarde-Este último con una sonrisa perforo con su habilidad demoniaca mi pierna derecha haciendo que mi rayo se desviara a su pecho. Y con un golpe en el estómago me saco de mi propia nube

Esta vez sí que sentí el golpe de lleno contra el suelo. No puedo dar más...

-debo admitir que casi sentí la muerte pasar por mis ojos- se ríe una vez más regenerando las heridas que le había provocado- no importa cuánto luchen los humanos no pueden vencer a los demonios.

Sus palabras, su sonrisa arrogante, tengo que seguir, veo a Rengoku que mira hacia atrás para luego verme a mi yo asiento, el amanecer ya viene, lo huelo, debemos atraparlo y que se quede hasta que el sol haga presencia.

Me pongo de pie con la pierna que no está perforada, mi cabello cae sobre mis hombros hasta el final de mi espalda y el sabor metálico en mi boca me incomoda, camino unos pasos hasta llegar al lado de Kyojuro otra vez, tomo bien mi katana

-¡no dejaremos que nadie aquí muera!- reordeno mi respiración, ¡concéntrate!

- ¡que maravilloso espíritu de pelea, están muy mal heridos pero el impulso de querer seguir luchando, deberían convertirse en demonios!- muerdo mi labio cuando este se prepara para atacar, pero el olor, un olor a perdida, la muerte está tocando nuestras puertas

-¡espera!- rápidamente me coloco frente a Kyojuro, recibiendo un dolor inmenso en mi hombro o un poco más abajo.

El polvo de apoco se dispersa y Akaza está frente a mi sorprendido.

Veo sus ojos sigo el arco de su cuerpo y su brazo derecho, esta perforado en su totalidad en mi pecho, casi cerca de mi corazón, pero no solo eso, este llego a perforar también el cuerpo de Kyojuro, no es posible falle.

-¡morirán!- más sangre sale de mi boca cayendo de lleno en el suelo- ¡sean demonios, díganlo que lo serán!- suelto una risa, no puede ser estoy alucinando...

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-mamá, mira es una flor bonita- entre en mi pequeña casa donde mis hermanas mayores ayudaban a mamá a cocinar, le extiendo la flor color naranja, ella se voltea siempre con su sonrisa y se inclina a mi altura

-si es verdad es muy bonita- ella toma la flor y la pone en mi oreja junto con mi cabello- es un color muy lindo para una flor ¿porque será?

-es el color del fuego y el fuego es cálido- ella sonríe cuando le explico- ¿Por qué te ríes mamá?

- tu eres como el color naranjo, una niña muy cálida- me sonrojo al escuchar sus palabras

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