Abby ya se encontraba en el avión rumbo a Londres, cuando su hermana le dijo que su Padre era un millonario no le creyó del todo pero tuvo que hacerlo cuando fue llevada hasta un jet privado. Nunca en su vida estuvo en uno, sin duda este juego que planearon sería el mejor. Ya deseaba llegar con su Madre y abrazarla, decirle cuánto lo ama y darle las gracias por traerla al mundo.
ABBY: Bueno... -murmura viendo por la ventanilla del jet- Ya estoy aquí... -suelta un suspiro- Ay, Dios... Espero que me ame. Quiéreme Mamá... Por favor...
⚜⚜⚜
Ya estaba en el aeropuerto donde aquel jet había aterrizado, ella bajó del avión para buscar a aquel del que Anny le habló. Ese aeropuerto era gigante así que se le complicó un poco poder buscar al mayordomo de los Stark. Hasta tuvo que subir a una de las bancas del lugar, afortunadamente Jarvis fue quien le encontró primero.
El rubio llevaba un pequeño ramo de flores y se lo tendió a la chica, tenían unas lágrimas en los ojos y le dijo que le extraño durante todo el verano.
JARVIS: ¿Qué te hiciste? -dice al verla con aquella ondulada cabellera-
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ABBY: Solo un nuevo look...
JARVIS: Y también regresaste con zarcillos... -le ayuda a bajar de esa banca- Vengan esos cinco...
Ella sonríe y mira aquella mano extendida para tomarla, aquellos ensayos en el campamento le sirven mucho pues logra el saludo especial de su hermana y Jarvis.
