Breve Introducción.

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La primera vez que ella ingreso a la ciudad, pudo notar como todo mundo iba apresurado, parecía que no podían tomarse un respiró, cada acción que hacían, cada paso que daban, acortaba un minuto de su estresada vida.

Temari era una rubia despampanante, pero se podía notar que ella no era perteneciente. Ella nunca se imaginó que, después de dos años de trabajó, terminará casada con uno de los miembros más ricos de aquel sitio: Shikamaru Nara.

Shikamaru era un hombre, que a primera vista, sólo era flojo y fastidiado de la vida, a Temari al principio le había desagradado, sus comentarios rozaban entre lo machista, sin embargo, poco a poco fue conociéndolo más. Uno de los factores que le impresionó, fue su habilidad intelectual, podía resolver cualquier problema empresarial en minutos, desde cuestiones financiarlas, hasta problemas éticos.

La primera impresión que tuvo de él sólo había sido una fachada, y eso era bastante entretenido, ya siendo su esposa, ambos se entendían muy bien, Shikamaru solía colocar sus brazos alrededor de su cintura y besar su cuello para empezar a subir lentamente, Temari se sentía excitada a más no poder por su marido.

Al segundo año de matrimonio, paso algo que no podía entender, Shikamaru había salido apresurado de la casa, y no había dirigido su mirada a Temari, los últimos días parecía serio, distante, como si tuviera problemas y no quisiera más que llevarlos él. Poco después, le llegó la carta de divorcio, acompañada de una nota.

Mi amada Temari:

¿Sabes? No sé en que momento te empecé a sentir tan distante. Ya no te veía a mi lado, ¿me puedes perdonar por eso?

Lo sé, nunca te portaste indiferente conmigo, pero es un fastidio sentir que avanzas y no te puedo alcanzar.

Recuerdo nuestro primero año de matrimonio, tus hábitos al principio se me hicieron exagerados, una casa siempre impecable, por ejemplo, y yo, sólo podía verte, ver como tus bellos ojos primeramente se iluminaban más, pero después se iban apagando.

¿Por qué eres así conmigo? ¿Por qué me haces sentir lo despreciable que se ha de sentir vivir a mi lado?

Puede ser que ser cierto Temari, no eres tú, soy yo, y lo lamentó, pero con esta carta te pido el divorcio.

Con amor sincero, Shikamaru.

La rubia no puedo evitar caer sobre sus rodillas y empezar a llorar, pero, lo que venía era más difícil.

Los problemas del amor y como no sobrellevarlos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora