Oscuramente Bella (Oscuridad I) ✔

Capítulo 37

-Angie:

Despierto con los brazos de Jadel al rededor de mi cintura, visualizo las rosas que se encuentran en el escritorio y sonrió es primera vez que alguien me regala rosas.

Siempre había esperado que alguien me regalara rosas, puede ser muy cursi pero siempre quise eso.

Agarro mi celular para ver la hora, pero aprovecho y saco una foto de nosotros.

El sonido que produce el celular al tomar la foto lo hace removerse, escondo rápidamente el celular.

-Buenos días.- dice con voz ronca.

-Levántate debemos ir a la universidad.- le digo.

-Debo ir a mi casa primero.

-¿Para qué?

-Debo bañarme.- se señala asi mismo.

-Podemos bañarnos juntos.- muerdo mi labio.

-No soy chico fácil Morgan.- dice ofendido.

Suelto una risa burlóna y me siento a orcajada en su abdomen, sus ojos brillan como los de un niño pequeño cuando le compran algún juguete nuevo.

-En la madrugada no decías lo mismo.- me burló.

-¿Qué pasó en la madrugada?

Todo mi cuerpo se tensa al escuchar la voz de David, Jadel se pone como un tomate y rápidamente me hace a un lado.

-No creía lo que me dijo el pajarito, tenía que confirmarlo con mis propios ojos.

-¡Derek Alejandro!.- grito fuerte.

Me levanto de mi cama, lo único bueno fue que antes de dormirnos no vestimos, yo pensé que el que entraría a mi cuarto sería el mocoso que tengo como hermano.

Voy a matarlo, por sapo.

-Tú.- señaló al niño.- metete al baño, ya vengo.

Mi padre tiene la cara más seria que le he visto poner a algún muchacho, pero el solo es una cosita inofensiva, ya seria culpa de Jadel si se deja intimidar por él.

-Derek.- tocó su puerta duro.- Abre la maldita puerta.

Insisto hasta que la puerta es abierta por mi pelirroja amiga envuelta en una toalla.

-¿Acaso estas loca? Solo son las seis de la mañana.- me reprocha.

-Aprende a madrugar, ¿Donde está tu estúpido novio?

-No se, no está aquí.- pasa su mano con pesadez en sus ojos.

-Vas a quedarte viuda antes de casarte.- le advierto.

Continuó buscando a Derek, maldito traidor. Con cada paso que doy me imagino como voy a patear sus pelotas.

-¿Derek?.- lo llamo.- ¿Derek Alejandro Morgan?

Escucho un ruido proveniente de la cocina, camino a paso apresurado, lo que veo me deja atónita.

¿Él está preparando desayuno? Seguro para Tif.

-Voy a matarte.- anunció.

Cuando se voltea sus ojos están super abiertos y se parece a gasparin, traga saliva, cada paso que doy a él, él se aleja más.

En un rápido movimiento sale corriendo de la cocina y yo detrás de él, lo veo esconderse detrás del sillón.

-Bebito, eres hombre muerto por sapo.- digo.

-Yo solo dije la verdad.- alza las manos.

Corro en su dirección y sale corriendo al otro lado, jugamos al ratón y el gato, no quedaré quieta hasta patearle el trasero.