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•Comenzading con esta parte así que sufran ahre que no era para tanto y wueno voten y comenten mucho mucho para que pueda publicar otro capítulo después•





Apoyo a Erick contra la puerta de nuestra habitación y su boquita se mueve al ritmo de la mía, o al menos es lo que trata de hacer.

Se separa avergonzado porque lo tome de sorpresa y trata de alejarse pero sujeto su cintura pegandolo a mi cuerpo.

─Así nunca vamos a ir ─susurra contra mi boca y yo asiento porque tiene razón.

Es que no puedo evitar no querer más de él todo el tiempo.

Todo él es tan adictivo.

Veo como me trae la ropa que tengo que ponerme y la coloco en la cama, acto seguido él entra al baño para cambiarse y yo rio negando con la cabeza.

Él dice que no tiene su cuerpo tan bonito como para que lo vea todo el tiempo, pero es que a mi me encanta su cuerpo.

Termino de cambiarme luego de unos minutos y veo que el también sale del baño y me mira una parte del cuerpo en especifico.

─Se supone que esto tiene que taparte la cara, Joey ─indica acercandose y me acomoda bien la bufanda logrando cubrirme hasta la mitad del rostro.

─Eres tan bonito ─suelto mirando como saca su lenguita para concentrarse en lo que hace.

─No es verdad ─dice sonrojado alejándose─ tú lo eres.

─Bueno dejemoslo en tu mentira ─digo riendo y camino hacia el nuevamente.

─Tienes la dirección del lugar en tu celular ¿verdad? ─me cuestiona arreglandose frente al espejo.

─Si bebé, ¿ya nos vamos?

─Solo falta el toque final, espera ─dice dirijiendose hacia sus cajones y saca un par de lentes de sol.

Mi novio es muy inteligente.

Sus pequeñas manitos acomodan bien mi cabello en el gorrito que me dio y me coloca las gafas para luego hacer lo mismo con él.

Su mano toma la mía para dirijirme al gran espejo que tenemos en la habitación e hizo un buen trabajo porque somos irreconocibles.

─Perfecto ─dice él, guiandome hasta la puerta y uno nuestros labios un corto tiempo escuchando sus suspiros─ ¿Por qué? ─me cuestiona al alejarse.

─Porque te amo, y también porque afuera ya no puedo besarte ─respondo con una mueca y el asiente besando una vez más antes de salir.

Hoy tenemos un día libre.

Walter salio y nos dijo que se perderá todo el día, podemos hacer lo que queramos siempre y cuando no nos metamos en problemas.

Así que Erick y yo decidimos ir al cine.

¿Joel, pero por qué no ver una película en el hotel desde Netflix? Se preguntan.

Erick y yo compartimos muchas cosas, nos gusta todo lo que al otro también, y no es por obligación de no causarle disgusto al otro, simplemente tenemos una gran química, y por coincidencia nos gusta lo mismo ─no casi todo─ Pero si muchas cosas.

Ambos preferimos salir al cine antes que ver una película desde casa, es bien pinche molesto, porque no tienes el ambiente que te ofrece un cine, y es algo en lo que él y yo coincidimos.

No tienes la gran pantalla, los asientos que se cierran automáticamente si te levantas, las pipocas, las gaseosas o malteadas, golosinas, aperitivos que tiene todo cine.

Todo cambio↝ᴶᵒᵉʳⁱᶜᵏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora