Ha Nacido Una Estrella [Akihiko x Misaki] TERMINADA

Capítulo 6: Juntos en el escenario

Llegaron a Seattle bien entrada la mañana, lo cual era perfecto, ya que el concierto sería por la noche,
lo que significaba que tenían todo el día para montar el escenario, y ensayar las canciones que tocarían. Sobretodo Misaki, quien nunca había cantado en un concierto, salvo cuando cantó "Shallow" con Akihiko.
Lo primero que hicieron ante todo, fue dirigirse al hotel Fairmont Olympic, en el cual pasarían la noche tras el espectáculo.
Allí, Akihiko cogió la suite executive para él y Misaki, y la habitación signature para Hiroki y Nowaki, porque se pasaban todo el tiempo libre juntos, y porque era más que notable que entre ambos existía una química impresionante.
Así que, tras hacer el check-in, cada pareja se fue a su respectiva habitación, quedando en verse media hora después en el lobby del hotel.

—¡Qué bonita!— exclamó Misaki cuando vio la elegante decoración de colores fríos y cálidos, en perfecta armonía, de la suite executive. Al sentir los brazos de Akihiko rodeando su cintura, y el aliento de éste en su cuello, el menor no pudo evitar sonreír y llevar una de sus manos al rostro del cantante— ¿Te das cuenta de que es la segunda vez que compartimos habitación?— preguntó el castaño con un tono pícaro que hizo sonreír a su ídolo.

—¿Y si fuese así siempre?— preguntó ahora el ojivioleta, besando el cuello de su fan, que esbozó una mueca confusa.

—¿Qué quieres decir?— quiso saber Misaki. Akihiko se colocó frente al chico, que le miraba sin entender a qué se refería exactamente.

—Que podría ser siempre así, Misaki— repitió con seguridad— Yo quiero despertarme todos los días a tu lado, y tenerte conmigo en cada momento del día y de la noche...— contestó, viendo si el menor era capaz de captar la indirecta. El castaño le miró con una sonrisa dulce, creyendo saber por dónde iban los tiros.

—Akihiko... ¿Me estás pidiendo lo que creo que me estás pidiendo?— preguntó con cierto nerviosismo, pero sin borrar la sonrisa. El peliplata asintió, logrando que el castaño se llevase las manos a la boca por la emoción del momento.

—Así es, Misaki... Quiero que te vengas a vivir conmigo— respondió esperando que el ojiverde aceptase la propuesta, pues aunque se conociesen desde hacía tan poco, Akihiko ya sentía que Misaki era el indicado para él. Al no obtener respuesta, el ojivioleta se tensó ligeramente— Bueno, ¿qué dices? ¿Aceptas?— insistió.

—¡Sí! ¡Acepto, claro que acepto, Akihiko!— exclamó lanzándose a los brazos de su ídolo, y abrazándolo fuertemente por el cuello. El mayor sonrió correspondiendo el abrazo.

Tras varios minutos de besos y mimos, Misaki y Akihiko, junto con Hiroki, Nowaki y el resto de músicos, se trasladaron desde su hotel hasta el lugar en el cual se celebraría el tan esperado concierto, donde ensayaron toda la tarde para que saliese a la perfección.

Sobre las 19:30, con varias copas de más, y alguna que otra raya de cocaína en el cuerpo, el peliplata se encontraba dándole al ojiverde varios consejos para que los nervios no le jugasen una mala pasada, y pudiese dar lo mejor de sí durante toda la actuación.

—Tú sobre todo tienes que confiar plenamente en ti, relajarte, y en lo maravillosamente bien que cantas, Misaki— dijo— Y recuerda, bajo ninguna circunstancia debes dejar que los nervios te traicionen— le recomendó Akihiko— Si te tranquiliza, mírame a mí todo el rato— añadió de forma dulce, tomando la mano del castaño entre las suyas, quien le miraba atentamente con una sonrisa tímida— ¿Estás preparado?— preguntó levantándose del sofá en el que estaba sentado junto con el menor, el cual asintió sonriente— Pues vamos allá— sentenció.