(Wo)man -Larry Stylinson

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Nunca fuimos a la misma Institución educacional, vivíamos cerca, básicamente éramos vecinas, pero nunca estudiamos juntos, no antes, ni ahora y dudo que después.

Pero nuestros viernes juntos se volvieron infaltables luego de cincos meses donde nuestras madres nos obligaban a sociabilizar entre nosotras. Ella siempre era la que venía a mi casa, yo jamás iba a la suya, ni hasta el día de hoy. Aún así, nuestras madres tuvieron aquella costumbre incluso antes de que naciera yo.

Resulta que nuestras madres se conocieron cuando Louise estaba en el vientre de su madre y tuvo un percance...

Mi madre casi la atropelló.

Del susto la llevó al hospital y estuvo vigilándola cada segundo, pues no quería que perdiera a su hija, tan solo tenía ocho meses de embarazo y era un verdadero desastre. 

Producto de todo el estrés que sufrió la mamá de Louise, nació ese mismo día, una víspera de navidad, donde su madre solo estaba en busca de un antojo de helado y su marido no quiso acompañarla.

Mi madre estuvo a su lado de principio a fin, no solo por culpabilidad, si no por compromiso, se sintió atraída ante la belleza de la mujer y de un modo la sintió humana y fraternal, se encariñó rápidamente de ella y al ser la primera en tomar en brazos a Louise, se convirtió en la madrina de manera inmediata, Jo, la mamá de Louise, vio la conexión entre unos ojos verdes y los azules de su pequeña que fue en aquel momento que supieron debían estar juntas por siempre.

Así fue hasta los quince años de Louise...

El fatídico año.

Josephine, falleció por un accidente automovilístico el día de mi cumpleaños.

Creo que nunca vi a Lou tan deprimida y dolida.

Primero de febrero de 2009.

Louise no fue durante un año a nuestra casa. Ningún viernes de todo el 2009.