5

957 83 19
                                    

— ¿Estas segura? — le pregunto.

— Si, Chocho dice que sera divertido ¿me ayudas?— se mira en el espejo, la ayudo a atar su vestido de la parte de atrás

Tiene un vestido negro, que le llega unos siete dedos arriba de las rodillas, y las mangas le llegan a los hombros.

— Te miras hermosa — le doy un beso en la mejilla, ella se voltea para abrazarme.

— Y tú te miras tan guapo— me da un beso corto en los labios — vamos.

Salimos de su habitación, para ir al carro de mi papá.

— ¿Ya tienes licencia?— enciendo el carro, y voy hacia donde ella me indica.

—Ya, la saque hace poco, mi prima me ayudó — la miro para ver su reacción, pero solo se sonroja— aún no creo, que pensarás que era mi novia.

—No molestes — me rio y ella solo hace una mueca.

Llegamos al lugar, es un salón bonito y grande, la agarro de la mano y entramos, pagamos la entrada pero, sin duda no esperábamos ver, a todas las parejas besándose y otras bailando muy pegados.

— Hola chicos — Chocho nos saluda— ¿verdad qué esta hermoso?

— ¿Qué no era una fiesta? — le pregunta Sarada.

— Lo es, una fiesta de parejas.

— Eso no me lo dijiste.

— ¿Es lo mismo no? Vamos a bailar —Chocho va corriendo a la pista donde esta Mitzuki esperándola.

— Entonces, vamos a bailar.

— No, yo no bailo — la agarro de la mano y la llevo a donde están todos— bueno, me servirá de práctica, cuando nos casemos — dice mientras mira a otra pareja, eso me hace sonreír y que mi corazón lata más rápido. Entonces, si se mira conmigo en un futuro— tengo que pasar mis manos por mi cuello y tú, las colocas en mi cintura, y solo nos movemos a los lados — pasa sus manos por mi cuello y yo los paso por su cintura, ella se recuesta en mi hombro— creo que esto fue una mala idea.

— No lo creo.

— Yo si— dice riendo — vamos a buscar algo en los bocadillos — me rio.

— ¿Y si vamos al carro a comer y ver una película?

— Eso es una gran idea — agarra unas bolsas de papas — que lo que pagamos, no sea en vano.

Salimos del lugar, sin que Chocho se de cuenta y entramos al carro,  a pasar lo que resta de la noche en el carro. Bueno por lo menos pedir permiso, unas cuatro veces a su padre tuvo su recompensa.

Me rio al ver una parde de una película.

— Oye Boruto.

—¿Si?— digo viéndola.

— ¿Sabes lo que hacen algunas parejas en los autos?— niego — se besan— ella se me acerca.

— ¿Asi?— nuestros labios, están a unos centímetros, ella sonríe para luego besarme.

Sin duda es una de las mejores noches de mi vida.

¿Por qué ella? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora