Un Bello Accidente

"Naufragio" (parte 2)

Muchas personas ya se habían deslizado por el tobogán y se estaban alejando en botes como el que tenía Camila.
La castaña estaba tan asustada que no sentía mucho dolor por el golpe que tenía en su cabeza, el cual seguía sangrando.
Camila se puso la mano en la frente para que no saliera tanta sangre y esperó a Lauren.
En eso, llegó Lauren con dos mochilas en la mano.
-¡Los conseguí! –dijo la pelinegra sonriendo- vamos...podemos saltar por la otra puerta.
-si...-dijo Camila mientras Lauren le daba su paracaídas- solo tengo que jalar el cordón, ¿verdad?
-si, al igual que la balsa-dijo Lauren- pero esa no la abras hasta que estemos en el agua.
-si-dijo Camila mientras se abrochaba el paracaídas- ¿sabes nadar?
-si-dijo Lauren poniéndose el paracaídas- ¿y tú?
-si-dijo Camila- bueno, hora de saltar
-¿saltamos juntas?-dijo Lauren mientras las dos caminaban hacia la puerta
-si-dijo Camila-oye, en caso de que nos separemos, jala el cordón del paracaídas cuando estés a unos 800 metros del agua
Al llegar a la puerta, Camila dirigió su mano a la puerta, pero sintió la mano de Lauren tomando la suya.
-mejor saltamos juntas-dijo la pelinegra guiñándole un ojo a Camila, a lo que ella asintió- oye, se me olvida...¿cómo te llamas?
-Camila, Camila Cabello-dijo la castaña sonriendo- mira, si he de morir debo decirte que eres muy buena persona y me da mucho gusto morir a tu lado.
-lo mismo digo Camila-dijo la pelinegra- y también debo decirte que me estoy muriendo de miedo
-yo también-dijo Camila- bueno...saltemos
-si-dijo Lauren.

Camila abrió con mucho esfuerzo la puerta y antes de que pudiera pensar o decir nada, la puerta se desprendió y sintió como Lauren brincó, jalando a Camila.

Se sentía peor que cuando bajas de una montaña rusa...era un sentimiento indescriptible.
Ninguna de las dos gritó, pero el aire hizo que se empezaran a soltar sus manos, hasta que finalmente se separaron.
-¡CAMILA!-gritó Lauren mientras se alejaba de ella.
-¡LAUREN! ¡RECUERDA LO QUE TE DIJE!- le gritó Camila a la pelinegra.

El aire tiró a las chicas hacia otro lado, totalmente opuesto a donde estaban todos en sus balsas y a donde el avión se dirigía.
Al estar a la altura deseada, Camila jaló el cordón del paracaídas y este se abrió.
Enseguida, vio que Lauren hizo lo mismo, pues vio otro paracaídas a unos 200 metros de ella.
Camila se agarró fuertemente de la cuerda del paracaídas y cuando cayó al agua, sintió mucho frío.
Estando bajo el agua, Camila se deshizo del paracaídas y jaló el cordón de la balsa.
Esta se abrió enseguida y Camila se subió en ella.
-¡Lauren!-gritó Camila buscando a la pelinegra, pero no la encontraba- ¡LAUREN JAUREGUI!

Lauren por su parte, se encontraba debajo del agua todavía, luchando por quitarse el paracaídas, temiendo que le cayera un rayo, porque estaba tronando mucho.
Cuando salió, lo primero que buscó fue a Camila, y la encontró.
-ESPERA LAUREN-le gritó Camila desde la balsa- VOY POR TI, NO TE MUEVAS.
Lauren se quedó viendo como Camila remaba hacia ella con los remos que traía la balsa.
En pocos minutos, Camila se encontraba junto a Lauren y le ofrecía su mano para subir.
-se ve muy guapa con el pelo mojado-pensó Camila viendo como la pelinegra subía a la balsa.
Camila abrió la boca para hablar, pero en ese momento, Lauren se le lanzó a los brazos.
-gracias Camila-dijo Lauren llorando- de verdad, si no fuera por ti, estaría muerta.
-no, no tienes que agradecerme nada-dijo Camila sonrojada- al contrario Lauren.
-por cierto-dijo Lauren apretando más fuertemente a Camila- llámame Lolo, es más corto y me gusta mucho más.
-ok, Lolo-dijo Camila- a mi me encanta que me digan Cami, aunque Camila no me molesta.