Las Escondidas

Capítulo XII

Ya iban dos muertes... Ana y mi madre, una de esas fue mi culpa... Era un gran peso... Estuve desanimada por todo el día, solo me encontraba acostada sin hacer nada... Génesis me intentaba sacarme alguna sonrisa de diferentes formas... Todos sus intentos fueron en vano.

Sólo llevábamos dos días y ya me encontraba en este estado, no quería saber que iba a pasar esta noche.

7:12 PM - Temperatura baja.

- Oye ¿no te sientes mejor? - Génesis se recostó de la pared.

...No respondí.

- Ven, vamos a hablar. No puedes ir así esta noche.

La miro... Me mantengo en total silencio.

- Rachel, no te quiero perder a ti también. - Se sienta en la cama.

...

- Yo también siento lo mismo que tu... Yo perdí a Ana y dejé que se fuera.

- No son casos iguales... Tu si te pudiste despedir de ella y yo no... Tu si la pudiste abrazar antes de despedirte y yo no... Tu si la pudiste observar en carne y hueso ¿adivina que? Yo no pude hacer eso... Entonces no es lo mismo.

- Tienes razón, pero las dos perdimos a una persona importante.

...

- Tienes que colaborar o te puede pasar lo que les pasó a ellas.

- No me voy a rendir, por favor dejame tranquila.

Ella me mira un poco triste.

- Está bien. - Salió de la habitación.

8:23 PM.

Me levanté, me quería bañar, probablemente me ayudaría, además ya estaba comenzando a oler algo mal.

Caminé hacia el baño, Génesis me vio, pero no hizo nada.

Entré e hice lo mío quitarme la ropa y entrar a la ducha.

Estar ahí me relajaba, me ayudaba en mi depresión de alguna u otra forma. Sentí el agua cada vez más caliente, tanto así que me tuve que apartar del lugar... luego cambio a fría.

- ¿Que ocurre? - le hice una pregunta a literalmente nadie.

El agua cambió a un color rojo escarlata, tenia miedo, algo me decía que era sangre, a los segundos comenzó un olor putrefacto... Parpadee y al otro lado de la ducha estaba mi madre en perfecto estado.

- Mamá - Dije.

Caminó lentamente, pasó por el agua carmesí y al llegar de mi lado se volvió un monstruo, era igual a como murió...

Reaccioné rápidamente y comencé a correr, solo pensé en salir.

Tiré la puerta con fuerza, me tiré en el suelo y empecé a tiritar de frío y miedo.

- ¿Que paso? Y ¿por que no tienes ropa? - Génesis se acercó rápidamente a mi.

- A-allá dentro.

Ella miró la puerta y entró al baño... Escuché que cerró el agua y volvió a donde yo estaba.

- Allí no hay nada.

Yo la miré.

- Ven, vamos a la habitación para que te vistas.

Me levanté y caminamos hasta allá... Como no tenia mi ropa aquí Génesis me prestó de la suya... Me decidí por unos jeans cortos y una camisa negra, sentí la ropa un poco apretada, pues Génesis es algo más enana y un poco más delgada que yo... Sinceramente me tengo que poner a hacer ejercicio.