Capítulo 30: Amato (Delcatty) y Adelo (Mujer)

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La vida de PokeSexuals

Amato (Delcatty) y Adelo (Mujer)

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"¡BAJATE DE MI ESPALDA!" gritó una voz femenina.

Una joven estaba hablando con una mujer de mediana edad que estaba sentada en una silla. "Pero eres tan joven, ¿por qué no intentaste buscar un novio?"

"¡Porque no necesito uno ahora mismo!"

"Adelo, por favor reconsidera. Por tu madre".

"Olvídalo. Voy a dar un paseo". ella se quejó alejándose de su madre. Junto a ella, un Delcatty llamado Amato se levantó y se fue con ella.

Se pasó el pelo largo y negro por detrás de la oreja cuando salieron de la mansión.

Los dos caminaban uno al lado del otro, sonriendo mientras disfrutaban de su compañía.

Espero que esté bien. pensó el Delcatty. Se frota junto al vestido blanco de su entrenador para consolarla.

Adelo sonrió y frotó la cabeza de Amato.

Ronronea por el roce, pero luego sintió algo extraño en el aire. Se detuvo cuando Adelo estaba confundido por qué lo haría.

Entonces se escuchó un crujido de los arbustos frente a ella.

"¿Quién está ahí?" llamado Adelo.

Su respuesta llegó cuando 3 hombres aparecieron fuera de los arbustos frente a ella.

"¡¿Quién eres tú?!" ella exigió dar un paso atrás.

"Solo unos pocos chicos notándote caminando solo".

Adelo dudó que cuando vio que uno de ellos tenía una soga en la mano.

"Supusimos que alguien vestido de esa manera debe ser cargado. Me pregunto cuánto ofrecería tu familia si te tenemos para rescatar". Uno con una gran sonrisa respondió.

Adelo dio un paso atrás cuando los tres hombres se acercaron.

"No hagamos esto más difícil de lo que tiene que ser. Prefiero no lastimar una cara bonita como esa". el segundo dijo.

"¡Aléjate!" ella gritó.

Amato siseó a los matones y se movió para que él esté frente a ella.

"Je, parece que el chico quiere jugar". rió uno de ellos.

Los tres sacaron sus pokebolas y las arrojaron. Salieron un Weavile, Crobat y Tyranitar.

Amato se enfrentó a ellos mientras los atacaba.

(Después de la batalla).

Amato jadeó cuando los tres Pokémon estaban en una pila, todos desmayados.

"¿C-cómo?" Dijeron llamando a su Pokémon de vuelta.

"Nunca dudes de mi Amato". sonrió Adelo.

"¡Olvidalo!" con eso se fueron corriendo.

"¡Oh sí!"

Adato suspira mientras se relaja un poco después de que todo haya terminado.

"Muchas gracias." sonrió Adelo rascándose debajo de la barbilla.

Soltó un ronroneo cuando alguien los observaba desde lejos. "Oh." susurró el pokemon.

Vio que el pokemon iba en contra del pokemon por el bien de su compañero humano y se sorprendió.

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