《Preparación》

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Después de darle la gran noticia a los demás tenían un montón de cosas por preparar, los trajes, la decoración, el sitio, la comida...Después de todo eran ellos dos y los chicos, mucha gente no sería desde luego, pero había muchas cosas que hacer y como toda buena boda ya sea grande o pequeña, la pareja estaba algo estresada con los ya mencionados preparativos.

-Es que si esto va aquí no es simetrico...- Creo que ya saben quién habló ¿O me equivoco? Efectivamente, Vegetta el maniático del orden y la simetría estaba haciendo una vez más de las suyas.

-Bueno, ¿Y que tal si lo hacemos en otro lugar?- La sugerencia del castaño no pasó desapercibida para su pareja ni mucho menos a pesar de que lo dijera en voz baja, así como quien no quiere la cosa. El de ojos violetas se le quedó mirando esperando una continuación, la cual por cierto, ni siquiera tenía intención en llegar pues el castaño se quedó mirando fijamente pensando en el pequeño esquema/plano que tenía delante.

-¿Que cambiemos el lugar?, ¿A que te refieres?, ¿Tienes un lugar mejor?- El azabache lo volvió a mirar mientras cuestionaba que narices se pasa por la cabeza de su prometido tras darle una rápida mirada al trozo de papel con varias indicaciones en el, esperando otra vez por una respuesta, y esperaba que esta si llegara no como la anterior.

-Bueno...a ver, a ver que si no quieres no pasa nada sabes- Las palabras salieron algo atropelladamente de la boca del castaño, no quería molestar, de verdad que no, pero al ver todas las molestias que se estaba tomando Samu en ordenar aquel espacio y que siempre diera con un callejón sin salida le sabia mal, sumando los dolores de cabeza que se llevaba el mayor por darle demasiadas vueltas a la organización y simetría de aquel lugar; a veces Vegetta podía ser irritante con aquel sentido de la simetría y el orden, tanto que hasta el propio morado acababa con dolor de cabeza. -Que yo lo decía simplemente por que te esta dando muchos problemas organizar esto, no se... quizás algo más sencillo... quizás... ¿Quizás en el mini bosque de la entrada?-

Madre mía, la sugerencia del más alto era una genialidad, ¿Como no lo había pensado antes? Igual era por esos horribles dolores de cabeza que traía desde que se puso a organizar el primer y recién descartado sitio, el cual sin ir más lejos estaba en la playa bajo la isla flotante del morado. Al diablo la playa, ¿A quién le importa la playa ahora? La idea de hacerlo en el mini bosque que tenia Ruben frente a su casa era simplemente genial, y todo sería simétrico, cosa muy importante que debemos recalcar si queremos que a Vegetta no le dé jaqueca.

-Es natural, bonito, cercano, perfecto y simétrico. Me encanta esa idea, eres un genio chiqui- Acto seguido le agarró de ambos lados de la cara y le beso con ternura. -Se lo diré a los chicos para que dejen la decoración-

-¡Ah no, de eso nada!- El castaño se abrazó al contrario impidiendo su movilidad y por lo tanto su misión para salir de la casa cercana al río- Tu te quedas en casa descansando, suficiente tienes con ese dolor de cabeza. De todas formas...siento como que no estoy haciendo mucho por la boda- Se veía algo decaído por la última frase que dijo, pero eso no le impidió que de un movimiento veloz sentara a su prometido en el sofá. -Tu te quedas aquí. No acepto un no por respuesta.-

Si algún tema era referente a la salud de Vegetta, Rubius era bastante terco al respecto, no quería que fuera a peor aunque de un simple dolor de cabeza se tratará, no quería ver mal a la persona que más le importaba.

El mayor no podía negarse, sabía que tenía razón en esta ocasión, la mejor opción era descansar por ahora, o bueno, esa era ahora su única opción ante la terquedad del oji avellana.

-De acuerdo, ten cuidado ¿Vale?- Le decico una sonrisa llena de cariño.

-Vegetta hijo mío, es medio día no va a salir ningún zombie o algo así, además, voy con mami Lusu - Se despidió con un movimiento ligero de mano y salio por la puerta dejando al morado tumbado en el sofá de su casa descansando.

El camino con Luzu fue rápido, Rubén le explicó el porqué decidieron cambiar el lugar, Luzu escuchó atentamente, bajo su punto de vista la entrada de la casa le parecía mejor que la pequeña playa. Una vez llegaron observaron a Fargan y Alexby dando indicaciones a los demás para colocar las decoraciones moradas y de color caramelo.

-¡HEY CHAVALES, QUIETOS PARAOS!- Bocifero el de complejo de oso.

Ante tal grito todos los presentes se le quedaron mirando, ¿Que le pasa? Es lo que todos se preguntaban. Incluso Luzu estaba sorprendido, pues no se esperaba tal grito por parte del que le acompañaba, hasta tal punto de que lo asustó.

-¿Pero que cojon...?- Antes de poder formular su pregunta Fargan fue interrumpido por el de sudadera blanca el cual obviamente tenía la atención de los presentes en ese momento.

-Cambio de planes, recoged los bártulos. Lo haremos en la entrada de mi casa.- Anunció haciendo que se miraran unos a otros.

-Sabia que ese bosquecillo era la hostia- El calvo supremo hizo acto.

-¿Todo esto para nada?- Alexby, hijo mío, si supieras que en los árboles la decoración es más sencilla...

-Bueno, ya le habéis escuchado, a recoger se a dicho- Willy intervenía ahora en este pequeño pase de frases.

Una vez recogido y ya en la entrada con árboles, todos los muchachos se dirigieron a Rubén, pues no sabían cómo quería que quedase decorado todo aquello.

-¿Y bien?- Lolito hizo su intervención esperando que les indicara dónde iría cada cosa.

-Vale, a ver. Las luces aquí y aquí. Fargan pon los farolillos paralelos al camino colgando de las ramas. Alex eso más a la izquierda. - Daba indicaciones a sus amigos una tras otra poco a poco entre luces moradas y farolillos pequeños juntándose con la sombra que hacían dichos árboles empezaba a quedar sencillo, sencillo pero precioso y perfecto a su vez.- Ay por las ratas que esta quedando gucci-

Una vez estuvo todo colocado se pusieron en el pie de las escaleras para observar mejor la decoración arbórea que organizaron en pocos minutos. La imagen era digna de boda sin duda. Los árboles rodeados con esferas moradas, pequeños farolillos atados en las ramas dando una sensación de comodidad y la tarima del suelo rodeada en sus bordes por pequeñas lucecitas amarillentas indicando los bordes de aquel pequeño sendero. Sin duda los chicos esta vez habían realizado un buen trabajo.

Cayó la noche y todos se fueron. Mañana sería el gran día. Rubius se quedó admirando semejante decoración sentado en las escaleras de casa, que mejor, que en la oscuridad para apreciar la luz.

Un Vegetta ya descansado salio a la puerta para pedir la entrada del castaño, pero sus ojos se desviaron a la bella iluminación que se hallaba frente el.

-¿Que te parece?-

-Es perfecta, y además, simétrica.-

Rubegetta Week [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora