Día #3: Baile lento
Resumen: Tanjiro fracasa en sus intentos por invitar a Zenitsu al baile de Invierno.
Tanjiro estaba desesperado.
Si bien la determinación era lo de menos, lo que mal traía al joven era que en ninguno de sus intentos había conseguido preguntar a Zenitsu si aceptaba ser su pareja para el baile de Invierno que él mismo chico era encargado de organizar. Como presidente del consejo estudiantil, Zenitsu tenía más compromisos que vida, siempre acarreando con deberes y diversas ocupaciones (no sólo en la escuela) que mantenían su mente trabajando día y noche. Tanjiro entendía todo aquello, él también tenía sus propias ocupaciones, sobretodo en casa, donde su familia y el negocio familiar (la panadería) que se encargaban de mantener con esfuerzo y esmero para cubrir todos los gastos y necesidades.
Él lo intentaba, de verdad que lo hacía, quería en serio pedirle que lo acompañara al dichoso evento, pero cada oportunidad que tenía se veía irrumpida por cualquier cosa. Y tenía que volver a empezar desde cero porque nunca estuvo ni cerca de llegar al tema.
La primera ocasión fue durante la mañana, en la escuela, específicamente durante la labor de inspección de los estudiantes que se encargaba Zenitsu de hacer, sin embargo, antes de que siquiera pudiera formular la pregunta, el profesor Tomioka apareció de la nada y tuvo que salir huyendo lo más rápido posible para evitar una reprimida por usar los aretes hanafuda —heredados de su padre— dentro del plantel educativo. A Zenitsu ya le había explicado aquello, él entendía, sin embargo siempre hacía mención de ello cada mañana que Tanjiro pasaba a saludarlo; era como una especie de rutina a la cual ya se había acostumbrado.
El segundo intento fue durante la hora de salida, se habían detenido a charlar antes de despedirse. Tanjiro se regocijaba en su interior, aquella sería su gran oportunidad, estaba seguro de ello por completo. Pero tal pareciera que los dioses estuvieran en su contra, porque justo cuando estuvo por formular la tan afamada pregunta, arribó como por arte de magia Kaigaku (el hermano mayor de Zenitsu), lo subió a la moto (¿en qué momento le colocó el casco?) y se lo llevó sin dejar que se despidieran. Tanjiro se quedó por unos minutos ahí parado, tratando de procesar lo ocurrido, después regresaría a casa abrumado al caer en la cuenta de que, otra vez, no pudo decirle a su amigo.
Sin embargo, Tanjiro no se daría por vencido con tanta facilidad, tenía una meta e iba a conseguirlo. Y esta vez no dejaría que ningún hermano sobreprotector (tóxico) ni profesor se interpusieran.
Se dio ánimos así mismo, asegurando que la tercera era la vencida.
—¡Zenitsu! —Tanjiro se acerca corriendo hacia donde él en cuanto lo encuentra por casualidad en los corredores. Todavía faltaban unos minutos para su próxima clase, si se apuraba y tomaba está oportunidad, cantaría victoria triunfante.
En cuanto escuchó que llamaron su nombre, Zenitsu levantó la vista de lo que fuera que estuviera leyendo. Pero antes de tener oportunidad para detenerse a girar en su dirección, Tanjiro ya se encontraba a su lado.
—Hey —saluda, sonriente—, ¿qué haces?
—Hola Tanjiro —corresponde Agatsuma, sonriendo de vuelta—, revisaba las solicitudes de los voluntarios para la organización del baile, será dentro de tres días y aún nos hace falta gente.
—Inosuke entre ellos, ¿no? —inquirio recordando todas las quejas por parte de su amigo durante la hora del almuerzo.
Al parecer Inosuke había sido sancionado por haber liberado a las ranas del laboratorio de ciencias, incluso si antes se le había explicado que ya estaban muertas, él no perdió la oportunidad para juntarlas todas y liberarlas por una de las ventanas del edificio escolar.
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Geometría
FanfictionSerie de one shots de estos dos tortolos. [Los personajes pertenecen al manga de Kimetsu no Yaiba, de Koyoharu Gotōge.]